Quedaban pocos meses para el desenlace, pero yo aún no lo sospechaba. Había decidido darlo todo porque valía la pena y estaba decidido a continuar sabiendo que no era lo mío. Llevaba por aquel entonces unos 6 años largos como agregado, con muchas dudas de si estaba en lo correcto. Compaginar trabajo y estudios resultaba difícil si a eso tenemos que añadir asistir a los medios de formación, sin embargo, a pesar del cansancio, hacía lo posible por hacerlo todo. A veces, por falta de tiempo o, simplemente, porque se solapaban cosas, establecía prioridades.

Un día en la charla fraterna que hacía con el director del centro (de las pocas que tuve porque no sé por qué razones resultaba difícil mantenerlas) le comenté este problema y el porqué los lunes llegaba tarde al círculo breve, la cuestión era que por la mañana me resultaba difícil ir a Misa porque tenía que trabajar, por la tarde tampoco podía ir porque tenía clases, así que el único momento que tenía era antes del círculo en una parroquia cercana al centro aunque llegaba 10 minutos tarde. Mi sorpresa llegó cuando el director me comentó, tal cual, que lo primero era el círculo, se quedó tan ancho. Lógicamente no hice caso a tal consejo porque lo encontré fuera de lo normal.

A la siguiente semana, en la charla, me dijo de entrada que se había equivocado en el consejo que me dio, que lo importante era la Misa, yo le contesté que sí se había equivocado y por eso no seguí su consejo. Tardó una semana en decirme que se había equivocado diciéndome que antepusiera un medio de "formación" a la Misa y no uno más del centro sino el director.

Esto sólo es una muestra pero abundan los ejemplos en los que se anteponen los fines de esta obra tan "santa" a las enseñanzas del Evangelio, y lo que más he visto dañada siempre ha sido la caridad. Me fui de "buen plan" como se suele decir, pero el tiempo que llevo fuera me ha hecho ver lo equivocado que estaba y el daño que me hicieron.

El Opus Dei vive para el Opus Dei, lo demás es pura fachada digan lo que digan, fariseísmo puro y duro.

Un saludo a todos y gracias porque a mí como a muchos otros me habéis ayudado.