La relación con Dios en términos de obediencia.- C.S.
Fecha Tuesday, 30 March 2004
Tema 090. Espiritualidad y ascética


Leyendo un libro sobre el contexto histórico en el que Jesús vivió, encontré algunas cosas que os pueden resultar familiares. Las adjunto por si a alguien le interesan.

(Sobre la Ley de Dios) "La ley, convertida en centro de la vida religiosa, hace concebir la relación con Dios en términos de obediencia y no en los de entrega filial o fidelidad por amor. Dios se convierte en el amo que inspecciona el proceder de sus siervos. La relación vital con él pasa a ser una relación jurídica; la experiencia de Dios pasa a ser la enseñanza de un código".

Los fariseos:


Los fariseos ("los separados") constituían una facción formada en su mayoría por seglares devotos que se proponían llevar las prácticas religiosas hasta los últimos detalles de su vida. (...) El ideal que los fariseos se proponían realizar era lograr que cada detalle de su vida, pública o privada, estuviese regulado por una disposición o estatuto divino, encontrado en la Ley.


(...) La obsesión farisea por observar las leyes religiosas llevaba a muchos a imaginar a Dios como un banquero que apuntaba en su libro de cuentas las acciones buenas y malas de los hombres. Si uno salía debiendo algo (como sucedía siempre), podía compensarlo con sacrificios o con obras de misericordia.


(...) Con toda su observancia de las reglas religiosas, eran amigos del dinero y explotaban a la gente sencilla con pretexto de piedad. Su fidelidad a las reglas los llevaba al desprecio de los demás, a los que consideraban "pecadores" o "gente sin religión". Para ellos, la Ley religiosa tenía que cumplirse a la letra, pero esta fidelidad dejaba muchas escapatorias y no evitaba la injusticia con los demás; la minucia en las cosas pequeñas llevaba al olvido de lo realmente importante: la justicia y el derecho.


(...) La obsesión por la observancia de la Ley los centraba en sí mismos y en su esfuerzo por observarla. La conciencia de este esfuerzo creaba el orgullo y la propia satisfacción, que se traducía en la idea de mérito. El empeño fariseo planificaba la vida según las observancias particulares y cuadriculaba la existencia, ahogando la libertad. Su individualismo religioso, centrado en la observancia y perfección personales, tenía consecuencias sociales, pues los llevaba a desinteresarse de los graves problemas existentes en la sociedad de su tiempo.


(...) No abordaban los asuntos políticos desde un punto de vista secular, sino religioso. Estrictamente hablando, no constituían un partido político, puesto que su objetivo era estrictamente religioso: la observancia de la Ley. Mientras ésta no se les impidiera, aceptaban cualquier tipo de gobierno. Unicamente cuando el poder político interfería en su modo de observar la Ley, se unían para formar un frente común contra él. Por contraposición a los materialistas saduceos, los fariseos eran espiritualistas no comprometidos con el hombre ni con su situación histórica. La empresa farisea de perfección desemboca en un fracaso, cuya raíz es la imposibilidad física de la observancia total. El hombre no es capaz de mantener semejante tensión. La Ley demuestra ser un ideal no realizable, y la perfección integral por medio de su observancia, un imposible. No es extraño que la hipocresía acechara al fariseo; bastaba relajar la tensión, aflojar la vigilancia, para traicionar el ideal. Y entonces no quedaba más refugio que la apariencia. No faltaron entre los fariseos espíritus sinceros que precaviesen contra el peligro de la hipocresía, pero fueron silenciados o no tuvieron resonancia."


(J. Mateos y F. Camacho, El horizonte humano, la propuesta de Jesús El almendro ed. Córdoba, 2003)

Gracias por vuestra inestimable ayuda de estos meses. Me habeis dado el empujón que me faltaba.


Un abrazo a todos,
C.S.







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