Hola Castalio!

Ayer navegando por Facebook vi un comentario que le hacía una numeraria a una persona que fue de San Rafael hace muchos años. El tono era "afectuoso" pero observé que a la vez, era genérico, distante. No usaba el verbo en personal "me alegra.." sino "nos alegra..." como quien habla de si mismo en plural. No juzgo su intención. Lo que si hizo fue dispararme la memoria y recordar que en el Opus Dei, como uno en general no puede hablar de lo que siente en las tertulias o a una numeraria en particular, o a sus amigas por miedo a develar su intimidad, uno habla en general.. en vez de "me parece" "siento", etc. usamos un disimulado "nos parece", "sentimos" ya que damos por supuesto que lo que uno siente u opina, no es algo mio y personal, sino del género humano y por lo tanto común a todos. ¿Estoy desvariando con esta consideración? ¿Es una apreciación muy vaga, remota o subjetiva o tiene fundamento en la realidad?

Les pregunto porque quizás estoy distorsionando. Es que me ha tocado una fibra íntima, ya que una pareja que tuve me recriminaba muchas veces este hábito de hablar de los sentimientos mios como en plural o en genérico, sin personalizar. ¿Es un hábito adquirido en mi de-formación por parte de mi madrastra guapa?

Besos, Lúlu