Opuslibros tiene muchas funciones, en este escrito me refiero a la del debate. Hace algunos días Morgana envió un escrito diciendo que está feliz dentro del Opus Dei, pero que acepta que dentro hay un problema de gobierno. El hecho de que una numeraria escriba en esta web para expresar su libre opinión, de verdad libre, es un paso enorme, en mi opinión, para Opuslibros. En la web se está dando un interesante fenómeno comunicacional y creo que está pasando desapercibido. Analicemos lo que está sucediendo al respecto.
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Si dividimos los escritos publicados en Opuslibros con una sola línea tenemos a los que están 100% de acuerdo con el Opus Dei y los que no lo estamos. La tendencia suele ser, sobre todo en la gente que está 100% de acuerdo con la Obra, en aceptar ciertos errores lanzando simultáneamente argumentos que afirman que esos errores no implican fallos sustanciales (de la prelatura para ellos, dentro nuestras ideas principales en nuestro caso). Creo que esto ha logrado, en Internet, la creación de dos bandos muy bien establecidos.
Aparentemente, todos escribimos argumentos que de una u otra forma buscan generar un “awareness” ante la sociedad en general. Cuando digo “todos” y “nosotros” me refiero a los que estamos a favor y en contra de la Obra. Todos queremos generar un “awareness” como si nuestra principal audiencia fuera la “la gente corriente.” Esas personas que todavía no conocen la Obra y a quienes pretendemos dar información veraz para prevenirlos, o informarlos, de lo bueno o peligroso que puede llegar a ser el Opus Dei. Creo que no nos hemos dado cuenta que “las masas” a quienes nos dirigimos no existen tal y como lo imaginamos. Estoy seguro que no son muchos quienes se preguntan a sí mismos qué es el Opus Dei, lo busquen en Internet y formen un juicio—y no prejuicio—de lo que es y no es la Obra. Creo que la gente arma sus percepciones con el contacto que va teniendo, dentro de sus circunstancias, con los miembros, exmiembros e instituciones afines a la prelatura que se le crucen en el camino.
Lo que quiero decir con este montón de letras es que la gente accesa páginas de Internet acerca del Opus Dei con actitudes preestablecidas hacia la prelatura por experiencias ya vividas (desde una noticia en un periódico hasta un encuentro físico con el Opus Dei). Es muy improbable que el primer encuentro que alguien pueda tener con el Opus Dei sea a través del Internet. De acuerdo a las primeras experiencias offline, si a alguien por ejemplo, no le viene bien el Opus Dei, encontrará en Opuslibros un paraíso de teorías que refuercen su actitud y la conviertan en un punto de vista concreto. Si, por el contrario, alguien simpatiza con el Opus Dei, encontrará en las páginas afines a la Obra los argumentos que necesita para sentirse en el camino correcto. Pueden surgir dudas en ambos bandos, pero al final aquí y allá hay suficiente información para que alguien vea lo que quiera ver, entienda lo que quiera entender.
Siguiendo esta línea de pensamiento, la concepción de nuestras audiencias tal y como las percibimos cambia sustancialmente. Creo que de acuerdo a las experiencias previamente vividas con el Opus Dei, la gente busca, encuentra y luego defiende los sitios de Internet que le provocan mayor comodidad interior. De esta forma, solo ingresa a los sitios del bando opuesto para defender las ideas que de acuerdo a sus circunstancias, le parecen más cerca de la Verdad. Es por eso que muchas veces surgen discusiones a veces bastante acaloradas dentro de todos los sitios para proteger el propio punto de vista de la Verdad ante las audiencias. Todos queremos exponer ante las masas la Verdad tal y como la vemos, pero no nos damos cuenta que ambos bandos estamos dirigiéndonos a audiencias distintas: en realidad cada quién se dirige a quienes lo quieren escuchar.
Dentro de este fenómeno, nuestras audiencias son en realidad los que nos apoyan; y los que no nos apoyan son en realidad, audiencias del otro bando que se meten aquí para apoyarlo, no porque les de verdad interese lo que tenemos que decir. Lo mismo sucede del otro lado. Esa es precisamente la actitud que hay que cambiar, pues gracias a ella se ha generado un antagonismo grande y un debate infecundo. Pienso que Opuslibros tiene un gran potencial de convertirse, sin dejar de ser lo que es, en un centro de debate del que se puedan sacar aportes muy beneficiosos para todos los lectores. Como dice más arriba en esta misma página, esta es una web sobre el Opus Dei, y en este sentido hay ventaja sobre otras webs. El debate es mejor cuando el terreno es imparcial; y aunque este terreno no lo es, es más imparcial que los demás sitios en Internet sobre la Obra por la inmensa diversidad de puntos de vista que aquí se plantean (un sitio pro-Opus Dei, por positivo que sea, no es imparcial tampoco y menos con la censura).
Es por eso que en realidad, la defensa a capa y espada de las ideas de ambos bandos es más bien inútil porque nadie sale beneficiado (aunque debo decir que aquí estamos más dispuestos a ceder ante ciertos puntos porque no estamos organizados de forma estructurada. Cada quién habla por uno mismo y no por un todo común). Hay que entender la importancia de aprender a ceder ante ciertos puntos de vista sin defender otros a la vez. Cuando esto sucede, el debate real se genera y se pueden comenzar a sacar verdaderos frutos, verdaderas acciones que nos acerquen a todos un poco más a la Verdad.
Por eso me encantó el escrito de Morgana, porque ella, talvez sin darse cuenta, está haciendo un aporte inmenso a todos al decir algo (no textual) como “soy numeraria y me encanta mi vida, pero hay errores de dirección en la Obra y punto.” Me fascina la naturalidad con que se dirige a las personas que se sienten dañadas psicológicamente, porque al decirles que las entiende sin decirles “…pero de todas formas ustedes son una excepción y la Obra en sustancia no está mal,” está diciendo que de verdad les comprende. Este tipo de intervenciones dan lugar a que se abran nuevos espacios para debatir a puertas abiertas sobre muchas cosas que pasan dentro de la Obra y que todos saquemos verdaderos frutos concretos. A que vaya desapareciendo el infecundo antagonismo que existe en la actualidad.
Todo comienza con aprender a ceder cuando otros tienen la razón. ¿Qué si vocación a la Obra o no? Pues que se meta un cura y ponga sus argumentos, si no tiene razón no la tiene, y si la tiene estoy seguro que nosotros también cambiaremos nuestra forma de pensar. No me cabe la menor duda de que aquí la mayoría intervenimos porque queremos acercarnos a la Verdad, con mayúscula, y las intervenciones sinceras del otro bando también son muy valiosas para encontrarla. De nada sirve que alguien diga “el Opus Dei es del diablo” y que miles respondan diciendo que sí lo es. Es mejor que personas como Morgana vengan y digan “pues no lo creo así, aunque en algunas cosas se deben hacer cambios.”
Si aumenta el número de intervenciones como la de Morgana, lentamente el debate se enriquece y se benefician los interesados, que son la única y verdadera audiencia. Sí, la única y verdadera audiencia a quien creo debemos tratar de unificar. Tratar de que por lo menos a Opuslibros la gente afín a al Opus Dei no solo venga a criticar y defender, sino también a exponer sus puntos de vista aceptando a la vez los de los demás. En síntesis, creo que la audiencia que nos debe importar más somos los exmiembros y miembros, agarrar los aportes tan increíbles que hay aquí y convertirlos en acciones que nos ayuden ya sea a unos u otros. Recordemos que de nuestro cambio y bienestar depende la percepción de la Obra en la gente, y el bien o mal que ésta pueda hacer a la sociedad.
SY
PD.- Este escrito lo hice hace algunas semanas y por falta de tiempo lo publico hasta ahora. Me he dado cuenta que Morgana parece no querer participar más porque cree que esta web es SOLO para que los ex compartamos nuestras experiencias. Creo que no es así. Creo que la web comenzó así, pero que ha evolucionado y la influencia en la sociedad que está teniendo no es sino fruto de esa evolución. Creo que Opuslibros es una psicoterapia maravillosa para todos los que nos fuimos. Pero también creo que los que nos fuimos le hemos dado varias funciones de acuerdo a lo que se nos ha ido cruzando por el camino. Entre más escritos y más diversos mejor. Luego que cada quién lea lo que quiera leer...
