Leo hoy la carta de atomito sobre la pérdida de su fe, lo que él llama apostasía que, por otra parte, no es es sino una medida eclesiástica que a la Iglesia no le gusta tramitar.
No eres el único que perdió la fe durante el opus, yo también y me consta que muchos más. Por no hablar de los que no se creen todo el asunto en su conjunto.
En estos días se ha contado que la madre Calcuta también la perdió y aunque a eso los interesados la han querido llamar "la noche oscura del alma", en realidad es una incompatibilidad entre fe y razón que unos prefieren no plantearse y otros la resolvimos como tu y yo y tantísimos otros, pensando. De paso, además, muchos dejamos de considerar a la Iglesia como una institución seria y preferimos seguir a Bertrand Rusell y tantos otros que explicaron el por qué.
Lo normal, para una persona razonable a cierta edad es no tener la fe que la Iglesia aconseja sino en todo caso mantener un agnosticismo práctico que no se hace cuestión del hecho religioso
Nosotros somos deudores de una tradición geográfica e histórica pero otras culturas tienen otra manera de resolver las incertidumbres humanas básicas.
En todo caso, como dices, el opus es muy poco religioso y un mucho voluntarista. Es una tropa disciplinada mentalmente y por eso la gente abandona en cuanto empieza a pensar por su cuenta.
Alberto Moncada
