Desde El Salvador.- Juan M.
Fecha Monday, 10 September 2007
Tema 100. Aspectos sociológicos


Hola a todos,

 

Aquí en El Salvador, Centroamérica, el opus realmente vive en una ínsula de poder e influencia, que nos retrotrae a otros tiempos...

 

Y si no lean el artículo de esta señora, columnista dominical habitual del diario La Prensa Gráfica que juntamente con el Diario de Hoy, son los principales periódicos de este país. Señalar que muchos artículos de El Diario de Hoy también suelen ser laudatorios del opus.

 

Algunas de las principales familias de este pequeño país son del opus y tienen un poder y capacidad de influencia enormes.

 

Juan M.

 

¿Por qué ayudar a construir Alamar?

Kalena de Velado
Columnista de LA PRENSA GRÁFICA

 

Hay un proverbio francés que dice que una sociedad vale lo que valen sus mujeres... La sabiduría de este dicho es evidente: si la mujer es valorada por todos y en especial por ella misma, el país en su conjunto crecerá en calidad de vida, pero sobre todo vendrá la paz social necesaria... En 1964, un grupo de madres jóvenes, inspiradas en las enseñanzas de San Josemaría Escrivá, fundador del Opus Dei, se plantearon formar el Club Iza, hoy Alamar, con el objetivo de apoyar a los padres de familia en la educación de sus hijas, llevándolas a que sean personas verdaderamente libres, con pensamiento creativo y con deseos de buscar la excelencia como actitud de vida...



Desde hace 43 años, el Centro de Complementación Educativa Alamar se ha dedicado a impulsar el desarrollo integral de la mujer y de la juventud salvadoreña educando en valores humanos. La idea educativa es formar actitudes que despierten el compromiso de mejoramiento personal, excelencia académica y búsqueda de la perfección en el trabajo, dentro de los principios de convivencia, cooperación y solidaridad. A través del tiempo han participado anualmente alrededor de 600 mujeres, llegando a impactar positivamente en la vida de más de 25,000 personas. Recientes estudios sociales reconocen y señalan a la familia y la mujer como creadores de capital social y humano, necesarios para el crecimiento económico y el desarrollo sostenible. Existen suficientes evidencias socioeconómicas y antropológicas que indican que la mujer tiene influencia en al menos 10 individuos: hijos, padres, vecinos, amigos, ahijados, hermanos, empleados, colegas y comunidad. La labor de educación integral en convicciones morales que Alamar realiza con niñas, jóvenes, universitarias y empleadas de su entorno se considera que beneficia directa e indirectamente a más de 250,000 personas. Para fortalecer un liderazgo responsable, Alamar cuenta entre sus buenas prácticas con el Programa Social de Ayuda Múltiple (PROSAM), en el que universitarias y bachilleres desarrollan diversas actividades sociales para contribuir a la erradicación de la pobreza en el país. Realizan proyectos de cooperación universitaria para el desarrollo comunal integral con asesoría técnica a micro y pequeñas empresas, así como con jornadas educativas y de salud preventiva en comunidades rurales de familias de escasos recursos.

Alamar es una propuesta educativa que enriquece el significado del compromiso de ser, tener y ejercer el liderazgo, al buscar que cada mujer se realice plena e integralmente como persona, desplegando todo su potencial innovador. Sus actividades educativas se orientan a prepararlas eficientemente en sus tres ámbitos de desempeño: familia, empresa y sociedad, de tal forma que puedan equilibrar su trabajo como madres, esposas y profesionales de forma competitiva. Alamar quiere educar para que sean ciudadanas democráticas y solidarias, y no frívolas egoístas desconectadas de los demás. Mujeres abiertas a descubrir por sí mismas lo que es la verdad, la belleza y la nobleza de ideales altos.

Ahora Alamar quiere llegar a más mujeres con la construcción de su sede definitiva, que contará con instalaciones apropiadas. Se podrá crecer y pasar de 600 por año a más de 2,000 mujeres entre jóvenes, universitarias, profesionales, empresarias y madres de familia. Seamos parte de este sueño de educar mujeres líderes que cambiarán El Salvador, ya que la edificación se completará solamente si se cuenta con el aporte de miles de salvadoreños generosos de toda condición social. Así se edificaron otras obras sociales como el Centro de Capacitación para la Mujer Siramá Centro, su extensión Siramá-Prusia, en Soyapango, y la Escuela Técnica de Hostelería Montemira. ¡Todo gracias al pensamiento humanista de San Josemaría!







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