Bienvenido a Opuslibros
Inicio - Buscar - Envíos - Temas - Enlaces - Tu cuenta - Libros silenciados - Documentos Internos

     Opuslibros
¡Gracias a Dios, nos fuimos
Ir a la web 'clásica'

· FAQ
· Quienes somos
· La trampa de la vocación
· Contacta con nosotros si...
· Si quieres ayudar económicamente...
· Política de cookies

     Ayuda a Opuslibros

Si quieres colaborar económicamente para el mantenimiento de Opuslibros, puedes hacerlo

desde aquí


     Cookies
Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información aquí

     Principal
· Home
· Archivo por fecha
· Buscar
· Enlaces Web
· Envíos (para publicar)
· Login/Logout
· Ver por Temas

     Login
Nickname

Password

Registrate aquí. De forma anónima puedes leerlo todo. Para enviar escritos o correos para publicar, debes registrarte con un apodo, con tus iniciales o con tu nombre.

     Webs amigas

Opus-Info

NOPUS DEI (USA)

ODAN (USA)

Blog de Ana Azanza

Blog de Maripaz

OpusLibre-Français

OpusFrei-Deutsch


 Correos: Salud mental. Para Armando.- Exnume

040. Después de marcharse
Exnume :

Quiero contestar a Armando la aportación que realizó el pasado día 26 de enero en la que trata sobre el tema que apunté en mi primer escrito.
 
Primero de todo, quiero darte las gracias porque sin pretenderlo, parece que hemos tocado un tema importante y que, seguramente, nos afecta a muchos de los participantes en este foro y posiblemente a todos.
 
Dices en tu escrito que quieres responderme con mucho respeto y así lo haces. Voy a tratar de hacerlo yo también con el mismo respeto, pero puntualizando algunas de tus afirmaciones que considero no les has cogido del todo el sentido que yo quería darles.
 
Podríamos decir que la línea argumental que utilizas y que te sirve para construir tu discurso consiste en defender la importancia de no dejar en el tintero los aspectos negativos, pues tienen tanta importancia como los positivos. Hasta aquí estamos de acuerdo.
 
Dices que son hechos reales, cosa que yo no he negado en ningún momento y afirmas –estoy de acuerdo contigo también- que están impregnados de la subjetividad con la que cada uno explica las cosas, también en esto estoy de acuerdo. En mi escrito no propugnaba olvidar, ocultar, endulzar e incluso negar esos hechos no-positivos o negativos de nuestras vidas pasadas. Simplemente animaba a la concurrencia y siempre desde mi experiencia personal -como haces tú- a dejarlos estar, a no darles más vueltas, a vivir la vida, a tratar de tener –en definitiva- salud mental. Digamos que trataba de transmitir a todos algo que yo practico y que me viene muy bien, que es tirar hacia delante, no pararse a recordar malos recuerdos, a decir aquello de “agua pasada no mueve molino”. Estarás conmigo, Armando, que en esta web tratamos de ayudarnos unos a otros, por lo menos eso es lo que creí cuando entré en ella. Bien, pues yo he tratado de ayudar transmitiendo parte de mi experiencia personal y de mi modo de vivir y ver las cosas.
 
Entiendo que no estés de acuerdo. Yo tampoco estoy de acuerdo con todo lo que tú dices, pero respeto tu opinión. En fin, sigamos analizando un poquito tu escrito.
 
Dices que yo exhorto a ser positivo. Digamos que no es tanto una exhortación sino más bien un consejo –como he dicho un poco más arriba-, una transmisión de mi experiencia personal que considero puede ser útil a algunos de los lectores de la web. Para empezar veo que a ti no te va esta manera de ver las cosas. Bien, no pasa nada. No me enfadaré por eso. Tú transmites tu experiencia y te respetamos. Yo transmito la mía y pido también que se me respete, como dices que haces.
 
Que Oráculo y Jacinto –como dices en tu escrito- “arrojan datos importantes para discrepar sobre la actitud que nos recomiendas”, me parece estupendo. Pero yo aporto otro punto de vista tan legítimo como el suyo y a alguien le puede servir, ¿o no?
 
Preguntas: “¿la realidad está compuesta únicamente de hechos positivos?” Y te contesto: ¡¡No!! Ni muchísimo menos. Cada día tenemos hechos negativos de los que aprendemos, sacamos experiencia, nos ayudan a ver las cosas de otra manera, etc. Y esos hechos también cuentan, pues claro que sí. Pienso que en la vida todo suma: lo positivo y lo negativo. Cuando yo tuve mi primer accidente de coche –por cierto, porque el otro se saltó un stop como una catedral, saqué mucha experiencia. Traté de olvidar el mal rato que pasé, saqué lo positivo que pude sacar de aquella situación y del resto me olvidé, pues no me daba para más. Ésta es la actitud que traté de transmitir en mi escrito.
 
Sigues afirmando que “no puedo estar de acuerdo en secundar esa especie de censura que sugieres en tu mail”. Vamos a ver, Armando, insisto: no pretendo promover ninguna censura. No se trata de eso. Se trata – y te lo repito una vez más, aunque no pasa de ser un consejo de hermano y no una imperativa- que de los acontecimientos de nuestra vida que cada día los tenemos buenos y malos, es quedarnos con los buenos, sacar la experiencia buena que haya de los malos y el resto, como el poso de un café- tirarlo por la pica, pues de poco más nos va a servir. Soy de los que piensa que de los errores también se aprende. De lo contrario, pensar que uno hace todo bien, sería pretencioso y orgulloso.
 
Por supuesto que cada uno se ha de expresar como quiera. Faltaría más. Si algo hay importante en la vida es la libertad. Te repito que la intención de mis palabras no era animar a omitir lo malo por salvaguardar la integridad de la Obra ni cosas así. Más bien era deciros a todos: “yo vivo así, tratando de sacar lo positivo de cada situación de la vida, incluso de las situaciones malas o negativas, y tirar adelante, pues tengo ahora muchas cosas estupendas en las que pensar: mi esposa, mis hijos, mi trabajo, mi familia, mis amigos”. Digamos que es una actitud en la vida la que trataba de transmitir y no sólo por lo que se refiere a nuestra relación pasada con la Obra, sino por lo que afecta a todos y cada uno de los aspectos de nuestra existencia.
 
Finalmente afirmas: “Piensa exnume, que muchos escriben para sacar lo que llevan dentro, para decir lo que no pueden decir a nadie, por lo cual te ruego comprensión para con ellos y si algún artículo no te gusta, deja de leerlo”. Esta frase te delata, puesto que en mi escrito, decía muy claramente “Me gustaría hablar con muchos de los que aquí escribís y daros ánimos y consuelo. Yo también me lo pasé fatal, pero me fui y punto. Ahora estoy feliz y nunca me he sentido tentado a echar la vista atrás”. ¿Acaso esta afirmación manifiesta incomprensión?
 
Y ya para acabar, sólo rebatirte con tus propias palabras. Dices y entrecomillo: “por lo cual te ruego comprensión para con ellos y si algún artículo no te gusta, deja de leerlo”. Lo mismo te digo, Armando. Si algún artículo no te gusta –como el mío- deja de leerlo. En ningún momento he pedido que lo leyeras o que me contestaras.
 
Un abrazo
Exnume
 
Nota de Agustina.- Hola "exnume", permíteme intervenir brevemente porque me quedé con las ganas en tu anterior correo y en éste, no puedo evitar darte mi opinión personal. Precisamente -si eres ex numerario- no deberías sólo recordar "lo bueno" y olvidar "lo malo". Porque de tantos ex que se han callado y siguen callados, se sigue beneficiando la obra. A la obra le viene muy bien que los ex estén silenciosos, así no sale a la luz pública las injusticias que comete y todo se queda  -para ellos- "en las habladurías de 4 o 5 que se fueron y no nos quieren bien, aunque eso no es lo normal, porque los que se van nos quieren mucho..." Una cosa puede ser perdonar y mirar hacia adelante -¡claro, todos rehacemos nuestras vidas y vivimos bien o normal fuera de la obra!-, pero no se debe olvidar -se lo debemos a los chicos y chicas jóvenes que son captados por la institución, y a tantos padres, y a tantos sacerdotes y hasta a la propia Iglesia- recordarles que si se acercan a la prelatura, sufrirán las prácticas, praxis, criterios, normas, costumbres, etc., que sufrimos los que, afortunadamente, estamos fuera. Tampoco se puede ignorar lo que están sufriendo los que están dentro, queriendo irse. Te aseguro que si se les dijera "que recuerden lo bueno", se sentirían tan desatendidos y tan extraños como si visitaran la web oficial de la prelatura o lo que es peor, como si hablaran con su director o directora "espiritual". Para todos los que necesitan ayuda real, seguiremos aquí. Un saludo, Agustina L. de los Mozos.



Publicado el Wednesday, 31 January 2007



 
     Enlaces Relacionados
· Más Acerca de 040. Después de marcharse


Noticia más leída sobre 040. Después de marcharse:
El arte de amargarse la vida.- Paul Watzlawick


     Opciones

 Versión imprimible  Versión imprimible

 Respuestas y referencias a este artículo






Web site powered by PHP-Nuke

All logos and trademarks in this site are property of their respective owner. The comments are property of their posters, all the rest by me

Web site engine code is Copyright © 2003 by PHP-Nuke. All Rights Reserved. PHP-Nuke is Free Software released under the GNU/GPL license.
Página Generada en: 0.123 Segundos