Bienvenido a Opuslibros
Inicio - Buscar - Envíos - Temas - Enlaces - Tu cuenta - Libros silenciados - Documentos Internos

     Opuslibros
¡Gracias a Dios, nos fuimos
Ir a la web 'clásica'

· FAQ
· Quienes somos
· La trampa de la vocación
· Contacta con nosotros si...
· Si quieres ayudar económicamente...
· Política de cookies

     Ayuda a Opuslibros

Si quieres colaborar económicamente para el mantenimiento de Opuslibros, puedes hacerlo

desde aquí


     Cookies
Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información aquí

     Principal
· Home
· Archivo por fecha
· Buscar
· Enlaces Web
· Envíos (para publicar)
· Login/Logout
· Ver por Temas

     Login
Nickname

Password

Registrate aquí. De forma anónima puedes leerlo todo. Para enviar escritos o correos para publicar, debes registrarte con un apodo, con tus iniciales o con tu nombre.

     Webs amigas

Opus-Info

NOPUS DEI (USA)

ODAN (USA)

Blog de Ana Azanza

Blog de Maripaz

OpusLibre-Français

OpusFrei-Deutsch


 Correos: La reunión de ex en Murcia.- Munruhig

040. Después de marcharse
munruhig :

Ya se anunció aquí mismo la intención de realizar una comida navideña de ex de ambas secciones en Murcia. Tuvo lugar el sábado, 16 de diciembre. Puede parecer un poco pretencioso que ahora haga una reseña del evento. Bien es cierto que hemos visto en las publicaciones internas (Crónica y Noticias, que pronto esperamos poder leer en Opuslibros) artículos sobre actividades de mucha menor entidad, y algo nos queda del tiempo que pasamos dentro.

No obstante, no es el mero afán imitativo ni de superación de los modos opusinicos de obrar lo que me mueve a decir algo sobre la comida del sábado. Me parece que hay algunos aspectos que de verdad pueden ser de interés a quienes visitan la web (estén fuera o todavía dentro de la institución).

Algunos nos conocíamos ya, otros nos presentamos allí mismo. Pero pronto se creó un clima grato en el que fuimos contando recuerdos de nuestra estancia dentro, de cómo fuimos dándonos cuenta de que aquello no iba, etc. Aunque terminamos tarde no dio tiempo a que todos contaran algo. Pero vendrán sucesivos encuentros, y habrá tiempo.

Cada día está más claro que hay más gente que hemos sido que gente que (de momento) está dentro. Y eso significa que al Opus o le importa un pimiento que la gente siga o no sabe cómo hacerlo. Desde luego, si todos los que estábamos allí hubiésemos seguido dentro, podríamos haber constituido varios centros (de ambas secciones) con su administración y la correspondiente atención sacerdotal, además de que con el chiquillerío que había por allí (los hijos de algunos de los asistentes) habría dado para una labor de club.

Me parece que fue una experiencia catártica, de acogida. No todos estábamos de acuerdo en la forma de ver las cosas, pero estábamos de acuerdo en que cada uno podía dar sus razones, que sería oído y valorado y sus razones sopesadas.

Se contaron muchas cosas, pero son historias de cada uno y lógicamente no voy a relatarlas aquí. Algunas han aparecido ya en opuslibros, otras las contarán los protagonistas, si les apetece. Y si queréis saber más, venid a la próxima reunión.

A algunos se nos hizo patente que parte de la complicación interior que teníamos en la Obra venía de que desde pequeñitos el Opus nos ha entrenado en el arte de mentir: que no se lo dijéramos a nuestros padres, que dijéramos a nuestros padres que no podíamos ir a verlos pero que no dijéramos que nos lo habían prohibido: que mintiéramos, vamos. Y cuando se pedía claridad a los directores, la respuesta era un severo correctivo: remito a lo que José Antonio, presente en la reunión, denomina su primer acto de rebeldía: publicado el miércoles 11 de octubre de 2006. También aprendimos en la Obra a manipular a la gente: aquello de “dile a tu amigo que haga eso o lo otro, o que tiene vocación” y conseguimos quedarnos sin amigos (porque se daban cuenta y nos mandaron a paseo o porque pitaban, y como no se pueden tener amistades particulares, pues eso, sin amigos).

En la reunión decía la mujer de un ex numerario que a nosotros nos pescaron porque éramos muy idealistas, con deseos de hacer cosas grandes y buenas. Y, claro, cuando a gente así la institución les va enseñando a negar en la práctica lo que se afirma en la teoría, pues acaba rompiéndose por dentro. Si lo que necesita gente así no es ni un psiquiatra de la Obra, ni una temporada en la cuarta planta, ni un “centro para que la gente descanse” (que es lo que parece que alborea en el opus), sino un reconocimiento (la verdad, vamos) de que nos ilusionaron unos ideales y nos han hecho vivir lo contrario. Y, por eso (para los que todavía estáis por ahí dentro), ni un ansiolítico: mejor una cerveza y un rato de amable y sincera conversación con alguien que nos acoja. Estando en la obra pocos encuentran eso, más bien se topan con el empeñado en que perseveremos cueste lo que cueste (no me repito: sobre la perversa trampa que hay en el sentido que dan en la opus a la perseverancia ya escribí el lunes, 11 de diciembre de 2006); una vez fuera, algunos siguen durante años sin entender qué les ha pasado y sin encontrar con quien aclararse. Pienso que lo principal de la reunión del sábado fue que ahí pudimos apoyarnos, entendernos, ver cómo nos veía la gente que, sin haber sido de la obra, nos quiere de verdad e intenta entendernos y apoyarnos.

¿Qué se necesita después de irse? Lo que necesita todo el mundo: un grupo de gente a nuestro alrededor que se reúne con nosotros porque está a gusto, no porque le mueva el interés de querer salvar nuestra mísera alma (o cumplir el plan apostólico): amistad limpia. De eso había en la reunión. Y eso es, en el fondo, lo que nos movió a pitar. Podemos recuperarlo, construirlo. Eso quedó claro. Y podemos darlo, también a los que irán saliendo, que lo están haciendo con la naturalidad que brota el agua de la fuente.

Resumo y acabo. Me parece que, de alguna manera, la magnífica tarea que realiza opuslibros (mil gracias a Agustina y colaboradores, una vez más) haciendo que la gente cuente y vea lo que otros cuentan, se ve mejorada cuando, además, vemos la cara a los otros, compartimos un tiempo juntos, llevamos a nuestras familias, hacemos posible que nuestros hijos se conozcan, etc. En definitiva, pienso que todos salimos contentos por haber compartido un rato con buenos amigos.

Respecto a la organización no fue nada complicado. Si alguien está interesado en montar algo así en su ciudad, encantado de contarle. No creo que acabemos escribiendo ningún vademécum de experiencias sobre reuniones de ex, que ya somos gente normalita y pasamos de esos rollos.

 

Munruhig




Publicado el Monday, 18 December 2006



 
     Enlaces Relacionados
· Más Acerca de 040. Después de marcharse


Noticia más leída sobre 040. Después de marcharse:
El arte de amargarse la vida.- Paul Watzlawick


     Opciones

 Versión imprimible  Versión imprimible

 Respuestas y referencias a este artículo






Web site powered by PHP-Nuke

All logos and trademarks in this site are property of their respective owner. The comments are property of their posters, all the rest by me

Web site engine code is Copyright © 2003 by PHP-Nuke. All Rights Reserved. PHP-Nuke is Free Software released under the GNU/GPL license.
Página Generada en: 0.128 Segundos