Bastian :
Si tienes necesidad de ese trabajo para poder subsistir, acéptalo. Pero debes saber que verás cosas muy raras porque allí mandan unos padres, no todos, sino unos muy concretos, y unas personas que ni son padres ni profesores pero que aparecen por allí para ver cómo van las cosas: los directores de la delegación del Opus.
Si no tienes experiencia docente ni pedagógica anterior, tendrás que aprender sus criterios; si no eres de la organización, ni simpatizante, te exigirán de alguna manera que te muestres muy católico y practicante. Te tendrán a prueba, te observarán, procurarán captarte y si ven que eres buen profesor puede que te respeten y no te atosiguen. Pero si eres nuevo en la profesión, estarás bastante sometido a los criterios del sistema para poder sobrevivir y mantener tu puesto de tabajo. No te recomiendo la hipocresía, porque te haría llevar una doble vida que acabaría volviéndote loco.
Mi consejo: si no tienes otra cosa y necesitas trabajar, acepta. Sé prudente, procura preparar bien las clases, sé un profesor ecuánime ante los alumnos y ante el claustro, no grites en clase, baja la voz para que se callen los alumnos. Muéstrate próximo a ellos pero sin confianzas. Prosigue tu formación académica por tu cuenta, no te estanques. Si tienes que hablar con padres en tutoría, no entres en compadreos ni les cuentes nada de tu familia ni de tu vida personal y tampoco lo preguntes tú sobre esos aspectos de ellos. El objetivo de la tutoría debe ser que el alumno mejore su rendimiento escolar y adquiera hábitos de estudio, trabajo, solidaridad, compañerismo, etcétera, pero no te metas en más honduras aunque te den pie. Es probable que no te encarguen las tutorías hasta que no te vean seguro en la doctrina y sus criterios.
En fin, yo he conocido buenos profesores que el colegio quería mantenerlos pero que al final tuvieron que tenderles un puente de plata porque no tragaban ni comulgaban con ruedas de molino. Y en cualquier caso, no te enfrentes al sistema ni aceptes participar en bandos. Ese es el camino, el de los bandos, para que te despidan. Porque de haber bandos sólo puede haber uno bueno, el del sistema; el otro es el de los enfrentados que siempre acaban muy mal.
También tendrás que ser justo en las calificaciones, pero habrás de saber que a veces hay que aprobar a alguien -o suspender- por otros criterios que te sugerirán. No es sencillo vivir como profesor en un colegio del Opus, aunque si es subvencionado puede que haya algún sistema de inspección que controle la inercia propia hacia la subjetividad. En ningún caso será un colegio normal, porque por muy subvencionado que esté lo seguro es que no será mixto, la condición para la subvención según la Ley. Aunque para un profesor siempre es más cómodo un alumnado no mixto, dicho sea de paso.
No sé amigo Rob si te he aclarado algo la cuestión.
Y una cosa final: encontrarás un montón de profesores sin repajolera idea de pedagogía ni vocación docente. Son los jóvenes licenciados del Opus que están allí porque no tienen otro trabajo tan apropiado para su plan de vida. No te arrimes. Busca mejor la amistad y el consejo de algún profesor mayor de cincuenta años, que si ha aguantado hasta ahora será de la organización o simpatizante, pero tendrá criterios para ayudarte. Ojo, digo un profesor, no un subdirector o un director.
Suerte.
Bastián.
Publicado el Wednesday, 26 July 2006
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