Hola a todos:

Hace unos dos años, "descubrí" esta página, y en el transcurso de este tiempo mi valoración del Opus se ha ido radicalizando. Antes creía que algunas de las "putadas" que me hicieron habían sido hechos aislados, debidos a la incompetencia y "mala leche" de algunos directores de la delegación de Barcelona, pero me he ido dando cuenta que es praxis común aplicable  a los que se van: intentar no darles un duro; que se  vayan, quedando la Obra limpia de mácula y para ello obligarles a que escriban una carta de dimisión sin ninguna queja; una vez fuera, borrar su rastro, como si nunca hubieran existido  y que se apañen tanto en el orden espiritual como temporal, sin aceptar ninguna responsabilidad sobre los efectos de su permanencia en la Obra, tantas veces producto de una manipulación de la famosa "voluntad de Dios a través de los directores", nuevo dogma de la Iglesia opusiana, que da y quita la vocación según le convenga.

Si la Igesia católica romana fuera una institución seria no había ninguna dificultad en poner remedio a tal desbarajuste, pues existirían unos cauces jurídicos serios en donde denunciar  estos hechos, y obligar a los Directores del Opus Dei a dar la cara,  y en un juicio, poner en claro cómo se aplican los principios cristianos en la Igesia opusiana, pero la realidad es otra, la autoriadad de la jerarquía está por encima del derecho, según la fuerza de una institución en la curia romana, así irán las cosas. No hace falta haber estudiado mucha historia para saber qué le interesa a la curia: poder temporal  y al Opus lo mismo.  De no ser así por qué esta obsesión de Roma de influir en la legislación de los países y de tener fuerza en los partidos políticos afines, al igual que la Obra, siempre amable y comprensiva con los poderosos y huraña con los débiles.

Estando así las cosas, no veo otro camino para frenar el ímpetu dañino de la Obra que dos medios: Influir en la opinión pública, como se hace con esta página, publicación de libros, cartas a los periódicos etc. y Organizar una comisión jurídica, para asesorar a quienes desean dejar el Opus y tienen vinculaciones laborales con ella, para que sean indemnizadas correctamente y se les pidan responabilidades si hay malos tratos y también para actuar delante de los tribunales civiles ante los delitos que comete la Obra: incorporar de forma dolosa a menores en la organización, abusar de la buena fe para dejar sin un duro a sus víctimas, no cumplir con los deberes en materia de seguridad social, impuestos con los que trabajan para la organización, manipulación de la mente, fundamentada en valores pseudoreligiosos, de sus víctimas.

Si estáis interesados, podéis contar con mi persona y mi dinero, pues todo cuesta.

Un  saludo.

Rocabertí