Estimado Amigos

Soy una persona que salio afortunadamente del Opus Dei hace 16 años, sentia que mi vida era una monotonia, que tenian mi vida controlada, que no tenia libertad de hacer lo que quisiera. No tenia amigos, toda mi vida se centraba en vivir como el Opus Dei me lo exigia, mi dinero, mi tiempo, mi diversión, hasta mi correspondencia era controlada por esta organización. Sali a los 22 años, afortunadamente tome esta decisión antes de hacer la "Fidelidad", tenia una gran necesidad de cariño, de afecto, el cual no me brindaba el Opus Dei...

Desde que me levantaba, hasta que me acostaba mi vida giraba en torno al OD, no compartia casi tiempo con mi familia de sangre por estar en las actividades de mi familia espiritual del OD. Conoci el OD en Medellin, Colombia, ciudad donde naci, actualmente vivo en Monterrey, Mexico. Mi primer encuentro con el OD fue a mis 16 años, estaba terminando la secundaria en un colegio catolico de sacerdotes seculares, y cerca de este colegio habia una residencia universitaria del OD de donde el director junto con otros miembros organizaban actividades para atraer gente del colegio: convivencias, retiros, actividades deportivas, excursiones, al igual que ofrecian sus instalaciones confortables en las que habian salas de estudio, biblioteca y sala de conferencias. Todo en un ambiente muy atractivo, ademas de ordenado y limpio, pues era un lugar donde se respiraba valores, el trabajo bien hecho, y se tenia la posibilidad de relacionarse con profesionales destacados de la ciudad, muchos de ellos del OD, otros colaboradores, pero toda gente muy influyente, pero que se caracterizaba por un trabajo bien realizado. Un gancho perfecto para muchachos que estan en la edad de las ilusiones, de tomar la decisión más importante de su vida, que es decidirse por la carrera que estudiarian en la universidad.

Un amigo de la secundaria que ya habia conocido la residencia universitaria pues me invito, y al paso de los años pues nos hicimos del OD, él ahora es sacerdote numerario, y no volvi a saber nada de el. Desde que uno entra al OD se acaban las amistades, dentro de la obra no se tienen amigos, este amigo por el cual yo entre, ya estando los dos dentro de la obra ya no fuimos amigos. Cuando tenia 21 años veia en  mis "hermanos" numerarios y agregados grandes (de mas de 40 años) el reflejo de lo yo llegaria a ser, y veia una situacion muy triste que yo no queria para mi, la soledad dentro del OD, la falta de cariño, de afecto y la vida controlada que tenian. Afortunadamente soy libre y asi como fui libre para solicitar la admision fui libre para tomar la decisión de irme. Hay gente que le entrego toda su juventud al OD, y que estan ahí unicamente porque si se salen no tendran a donde ir porque no tienen amigos, ni familia, ni dinero. Ademas el rompimiento con el OD es sumamente doloroso y trae una gran crisis sicologica en las personas, porque estas acostumbrado a convivir con gente que tiene un mismo lenguaje, todos caminan hacia el mismo objetivo, hacen las mismas actividades, toda tu vida confluye en una sola cosa que es el OD y de un momento a otro romper con esto, es reinsertarse en la verdadera realidad de la vida lo cual es muy dificil.

Me gustaria tener contacto con alguna exnumeraria o exagregada en Monterrey Mexico, soy soltero, ingeniero, trabajo para una compañía norteamericana. No odio al OD, pero tampoco lo defiendo. En un futuro no me gustaria que un hijo mio a tan temprana edad sea "santamente coaccionado" para acercarse al OD. Se que la Obra de Dios hace mucho bien en el mundo pero tambien mucha gente se ha visto afectada por ella.

Saludos

Alvaro