Hola a todos,

En primer lugar quiero deciros que Mercy (leed el último párrafo de su carta del 29.4), ha quedado con el médico que la cesárea se la harán el día 24 a las 7 de la mañana, así que Santiaguito será tempranero y madrugador. Ella está un poco nerviosa y nos pide que recemos un poco para que todo vaya bien.

Estos días me sugiere muchas cosas la correspondencia de la web, que me parece, como casi siempre muy buena.

Lo primero agradecerle a Alberto Moncada su gestión en Roma y decirle que la próxima comida que hagamos en Madrid tiene que llevar incorporado un buen bailongo para desquitarnos agusto de mojigaterías opusinas. A ti ya se te ve bien ventilado, pero yo aun conservo rincones absurdos. Yo entré, con 15 añitos, sin conocer discoteca alguna, y ya hace años que descubrí lo terapeútico que es el baile. Quedamos ¿vale? y que no sea muy tarde...

Otra cosa, yo no te he visto nunca en vivo, pero he de decirte que en el programa de la Clave, estás  ¡super atractivo!. No creo que nunca te hayas puesto colorado, asi que ahora menos. Me encanta el espíritu joven que tienes y las ganas de guerra. ¡Me identifico contigo en esto!

Otra cosa, no entiendo bien la molestia de Ana Azanza por llevar el escrito a Bruno Buozzi. Yo lo veo como un simple "acuse de recibo forzado". Ya sabemos que no se van a hacer eco de nada, y a nuestra pregunta de que qué pasa con nuestra denuncia, nos constesterían SIEMPRE, y lo digo por experiencia con Pilar Cremades (creo que yo también voy a empezar a dar nombre en público), que no saben de qué hablamos porque no han recibido nada. Ahora ya no podrán decir eso. Para mi, eso significa la visita de Alberto, además de una buena obra, porque les impedimos que sigan mintiendo. Espero que en el cielo nos lo recompensen.

Un fuerte abrazo.

Otra felicitación de campeonato va para el querido Heavy (7.11). que nos ha contado su dolorosa experiencia de una forma bien gráfica y profunda. ¡Qué razón tienes... sin corazón, sin inteligencia, sin voluntad, sin libertad,  sin salud, sin tiempo, sin dinero....sin todo nos quedamos !Realmente qué burros hemos sido!

Y también te doy la razón en que ese dios padre infinitamente "justo", que atormenta a sus hijos con las penas del infierno no existe. Por eso lo mejor, es dejarle que siga viviendo en el museo de los horrores, que son los centros del Opus Dei.

A veces pienso que cada uno cuando se muera se encontrará con lo que espera, y ellos se darán de narices con el dios justiciero que pide todas las casillas rellenas de las hojas de normas. Yo espero dar de lleno con el Amor. Ahora, como tu Heavy, ya he comenzado a experimentarlo, aunque me queda aun mucha rabia.

Querida Irache, tu solicitud (7.11)  me ha encendido. Yo también he sido un fanática imbecil (esto no lo dices tu) como tus hermanas.

 Mis hermanos fueron conmigo duros mientras fui una intolerante talibana, y hoy lo agradezco. Cuando volví a casa rota, su actitud cambió y fue de acogida y ayuda. Aunque como cuenta Quivi, yo perdí mi sitio en la familia, y no lo he recuperado aun, y han pasado 16 años.

Yo entonces, y tus hermanas ahora, no son seres enfermos e inválidos a los que hay que aguantar lo que sea. Una cosa es que no les ataques y no respetes su vida, y otra que tengas que hacerte la tonta y aguantar todo lo que quieran hacerte o decirte. Yo creo que precisamente el cariño no está reñido con el estar en tu sitio y exigir un respeto.

Ellas llevan su vida, rarísima, por cierto, y tu la tuya. Si quieres conceder para que estèn contentas que sea porque quieres. Sin embargo mi consejo es que hagas simple y llanamente una copia impresa de la carta que enviaste a esta web y se la des en mano, o se la mandes antes de tu visita. Que sepan cómo eres, lo que sientes por ellas, lo que te gusta y te molesta... De verdad que eso sí que les va a hacer pensar. Eso puede ser la ocasión de que se rompan por dentro las corazas que llevan y se echen a llorar, como contaba Quivi.

Cosas así son las que a una le hace despertar, y de verdad que lo que necesitan tus hermanas es una buena ducha helada, que les haga reaccionar de tanta droga que se meten a diario.

Por cierto, me encantaría que nos cuentes a tu vuelta, tu impresión de la casa de Roma: normalidad, sencillez, distensión... A ver qué puedes ver además de la salita y el oratorio. Cómo de normales son sus hermanas...

Un abrazo y sé fuerte para pedirles a tus hermanas que sean gente de la calle de verdad!.

La persona que me ha llegado al alma es Helso (9.11).

Hijos míos os dejo en herencia, en lo humano, el amor por la libertad. Más o menos textuales, estas palabras a mi se me quedaron profundamente grabadas como dichas por el fundador. Y mira que saben nada lo que es la libertad!. Tienen poco con su vida que tienen que mangonear las ajenas. Siempre en el pedestal de la verdad y del reparto de impresos para conseguir el cielo, ninguneando la autoridad legítima de los padres.... En fin, creo que me enfado más que tu, Helso. Son tus padres y quizá les toleres lo que hacen. Yo ya hubiese provocado algún terremoto. Pero es que esa es la auténtica formación que se imparte en la obra, la de cómo romper familias, parejas, hundir vidas, porque para ellos, como dices, su verdad es lo primero de todo y caiga quien caiga.

Desde que ayer leí tu carta, he pensado mucho en lo que cuentas. Creo que haces bien con tu decisión. Tu conoces a tu familia, pero yo sería totalmente radical con mis padres y les hablaría de perder realmente a su nieta y a ti mismo, si se empeñan en su actitud. Lo más importante me parece que es que hables mucho con tu hija y oiga de tu boca qué es una buena persona, lo importante que es abrir el corazón a todos, quitarle de la cabeza las moralinas absurdas y la necesidad de piedades y obras que si a ti no te importan ¡cuanto menos a Dios! Que sea una niña, que por tu boca y la de su madre aprenda a vivir sin miedos ni culpas, a tener un corazón grande abierto a todo el mundo. Explícale bien que lo que le pasa a sus abuelos es un fanatismo, una enfermedad, y que  son buenísimos y merecedores de todo su cariño. Que no aprenda a juzgar como malos y buenos a nadie, que es lo que tus padres le están enseñando de ti y tu mujer.

Reconozco que es difícil educar, ser respetuoso de la libertad de los hijos, no condicionar como lo hacen tus padres. Aunque tu no lo veas, la Vida te da todos los medios, asi que seguro que aciertas con lo que hagas. ¡Estoy contigo! Un fuerte abrazo.

Bueno, y por hoy ya basta. ¡Gracias por el aguante!

Carmen Charo