Saludos a E.B.E.

Anoche me quedé leyendo lo que habías publicado sobre la conciencia y la Obra y noté un "click" tremendamente maravilloso en mi cabeza.

Hace siete años noté un "crack" (como de aviso): sentarme a rezar face to face, y a la vez estar perteneciendo, toda enterita, a una organización de doble vida, donde a las personas se las trata como algo de usar y tirar se convirtió en un cóctel molotov en mi cabeza.  Dejar de obececer era como no estar entregándote totalmente (y si uno había dejado familia y posibilidad de marido e hijos, la cosa no era como para estar a medias tintas, ¿no?); pero si obedecía, en muchas ocasiones sentía que estabas saltándote el sentido común, los derechos humanos elementales, los propios o los de la de al lado mismamente. Uff.

¿Por qué no me iba y qué pasaba en mi conciencia?. Tenía perfectamente soldadas las ideas de Voluntad de Dios=Opus Dei / Dios está empeñado en que se realice / Opus Dei=Intervención de Dios en estos tiempos para salvar a la Iglesia de la crisis que sufre /  Salida del Opus Dei= Ruptura del plan que Dios tiene para salvar almas /

Ese crack de aviso que nombré antes me dio tanto miedo,  tanto,  que pensé que me iba a volver loca, y en mi cabeza cabía perfectamente lo de ser obediente hasta la muerte y muerte de cruz pero ¿loca?, no.  No sé qué hubiera ocurrido, quizá fue una neurona columpiándose ... Pero fue lo que me hizo poder saltar por encima de las soldaduras sin sentir que estaba haciendo algo malo. 

Pero necesitaba entender además de sentirme tranquila. No había llegado a ninguna conclusión que me liberara realmente, ... hasta que .... ¡¡ta cham, ta cham: leo tu escrito!!. Es como si se empezara a deshacer la maldición, serán cosas del de arriba pero me pasa como a Kaiser con Neska, ¡¡te imagino hasta guapo y todo!!. 

Todas las gracias del mundo mundial para ti, y si  pudiera, un abrazo de los que quitan la respiración ... me pega que será transatlántico porque te imagino por tierras de Sudamérica... no sé.

Mafalda