Buscando en mi mente anécdotas de hace casi 13 años que salí del Opus Dei, vagamente preciso alguna que otra experiencia. Sin embargo leyendo los escritos, mi mente se transporta inmediatamente al sitio y lugar del hecho, como si fuese una pelicula que inmediatamente lo transportara al lugar de lo sucedido y hasta poder recordar las reacciones de la gente, lugares y hasta olores y situaciones vividas. Que poderosa es la mente. Recuerden que esto sucedió en una residencia de estudiantes de diferentes lugares de un pais de centroamerica, lease Costa Rica. 

Anécdota 1. El cura egoista

Se organiza una excursión para dormir en las faldas de un volcán. Como mi experiencia en excursiones es nula, y sin ningún equipo para ello, al salir de la excursión se pasa por la delegación a recoger un sleeping bag, o bolsa de dormir para que pueda usarlo en la noche. Cuando lo estabamos cargando al carro, sale un cura todo apresurado, argumentando que esa bolsa es la de él, y que no la prestará para llevarla a ningún lado. Que de esa forma se le han perdido bolsas anteriormente. Al principio, el grupo reunido pensó que era en plan broma, y hasta nos reímos del suceso, sin embargo al final nos dimos por enterados en era en serio y no permitió que lo llevara. Recuerdo que esa noche fué extremadamente larga y extremadamente fría. Un cura que estaba contiguo, en la noche reñinaba los dientes y constantemente se movia buscando calor dentro de su bolsa. Mensaje: Si vas de excursión, asegurate llevar todos los implementos necesarios para tu uso personal, si no es así, es mejor no ir porque de seguro la pasarás muy mal, y no esperes que nadie te brinde una ayuda, que el uso de sotana no asegura mayor cosa.

Anécdota 2. El cura con alteración de conducta.

En el centro donde vivía, había un cura muy mayor, de la parte de Sevilla (España). Sin duda que conforme pasaban los días se le veía más deteriorado, y con un nivel de angustia y desesperación cada vez mayor. Rápidamente la paciencia se le desaparecía, y daba camino a histerismos fuera de lo común. Antes de salir, las discusiones entre él y el director del centro eran cada vez más fuertes y en presencia de todos. Tenia un apremio casi enfermizo para que le lleváramos personas nuevas al centro, pero solicitado de una manera un poco neurótico. Mensaje: Que triste es envejecer en el Opus Dei.

 Anécdota 3. Lo que se dejó el Opus Dei.

Al salir del Opus Dei di por supuesto que un radio que habia pasado de mi habitación a la sala de los numerarios (vivía en un centro de estudiantes), ya no me pertenecía. Dicho y hecho, yo no lo reclamé y ellos no lo devolvieron. Mensaje: Todo aquello que cedes o dejas ya no es tuyo. Tenlo presente para saber a que atenerse.

Anécdota 4. Alarma general.

El centro de estudiantes tenía por supuesto servicio de administración. (Pobre trabajo el de ellas, tener que dejar la ropa aplanchada encima de la cama de personas con la más mínima consideración, más si no son de la obra). Una noche el director salió corriendo hacia la sección de mujeres por la parte de la calle, junto con muchos residentes que en esos momentos estabamos durmiendo. La razón, habian enviado un mensaje por el teléfono interno que alguien estaba forzando la puerta de entrada de dicha sección. Inmediatamente estabamos afuera con fajas, reglas y todo aquello que sirviera para perseguir al supuesto ladron. Al final, el antisocial se fué al ver el escandalo que había provocado. Mensaje: Si alguno que lee esta web es ladrón de barrio, no se le ocurra meterse a la administración de una residencia de estudiantes.

Anécdota 5. Residentes cleptómanos.

En las residencias de estudiantes, no existían llavines en los dormitorios. (no se ahora). Un día se me desaparece la calculadora y por más que la busco no la encuentro. Otro estudiante de medicina,  me preguntada constantemente si ya la había encontrado. La duda entra y la malicia indígena también, por lo que en un momento de rezo del rosario en el primer piso, escapo y entro al cuarto de dicho elemento. Busco por diferentes sitios hasta que la pregunta, si yo quisiera ocultar una calculadora donde la pondría, y allí estaba. Inmediatamente se notifica al director y se realiza una inspección minuciosa. Aparecieron cosas de diferentes residentes que también se habian desaparecido. Al terminar el año en curso, terminó tambien la residencia para dicho compañero. Mensaje: Sea ordenado y cuida tus pertenencias fuera de casa.

Anécdota 6. Más residentes cleptómanos.

Desaparece una grabadora y el residente comienza a investigar en la ciudad, los lugares donde llegan a vender productos de dudosa procedencia. Y vohalaaa. encuentra su grabadora en una tienda de cosas usadas. Investiga a fondo y logra determinar que compañero residente fue el que la vendió. Al terminar el año en curso, terminó tambien la residencia para dicho compañero: Mensaje: No se lo llevan a uno porque tienen que darle de comer.

Anécdota 7: La salida.

Como contaba la vez anterior, el director sabía que dentro de 4 días no haría la renovación. En el comedor me encuentro a otro numerario y me dice que el creyó que yo estaba muy mal en el hospital, porque según el director tenían que encomendarme, porque estaba en cuidados intensivos. Mensaje: Con que velocidad acomodan toda la situación en el Opus Dei.

Anécdota 8: Amenaza al decir de la decisión de no renovar.

Al negar el director un permiso de ida a casa de mis padres. Le dige directamente, que he pensado muy bien la situación y he decidido no renovar el próximo 19 de marzo, dentro de escasos 15 días. El director me dijo que yo no estaba preparado para salir afuera, ya que en la calle era un mundo completamente aparte al que habia vivido en las casas de mi papas y en la residencia de estudiantes. Le dije que en el momento de mi muerte, estando en la presencia de Dios, el reconocería el tiempo que le había servido en el Opus Dei y que esperaba que fuera suficiente para dejar entrar a vivir eternamente en su presencia. Que por lo menos, algun valor tendría que tener en mi juicio final. Solamente pidió que le informara al día siguiente del 19 si no habia renovado. Mensaje: Dios nos conduce a la entrada y tambien nos conduce a la salida.

Anécdota 9: Cita post salida.

Contactamos con el director una cita para ver la opción de hacerme cooperador. Estando en el restaurante de comida rápida, tuve que pagar la cuenta y dar la impresión al director que ha partir de ahora ya yo podía pagar la cuenta, algo que el no podría hacer mientras estuviera del otro lado. Quedamos en hablar a los pocos días, sin embargo nunca más volvimos a contactarnos. O sorpresa, a los pocos días muere El Padre, sin ni siquiera enterarme de nada. Y a los pocos meses el director decide abandonar sus muchos años de prelatur. Mensaje: Nunca digas de esta agua no beberé y solo los rios no se devuelve. Como puede la vida cambiar en tan poco tiempo. No da un cierto resquemor y a la vez agradecimiento.  Gracias Señor, por dejarme estar en el Opus Dei tres años de mi vida,  y gracias por dejarme salir al mundo y ver la diferencia.

A todos los cibernautas, como decia un exnumerario que quería hacerse millonario, y ahora lo es, ánimo. Un saludo y hasta la próxima.

JFI