Bienvenido a Opuslibros
Inicio - Buscar - Envíos - Temas - Enlaces - Tu cuenta - Libros silenciados - Documentos Internos

     Opuslibros
¡Gracias a Dios, nos fuimos
Ir a la web 'clásica'

· FAQ
· Quienes somos
· La trampa de la vocación
· Contacta con nosotros si...
· Si quieres ayudar económicamente...
· Política de cookies

     Ayuda a Opuslibros

Si quieres colaborar económicamente para el mantenimiento de Opuslibros, puedes hacerlo

desde aquí


     Cookies
Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información aquí

     Principal
· Home
· Archivo por fecha
· Buscar
· Enlaces Web
· Envíos (para publicar)
· Login/Logout
· Ver por Temas

     Login
Nickname

Password

Registrate aquí. De forma anónima puedes leerlo todo. Para enviar escritos o correos para publicar, debes registrarte con un apodo, con tus iniciales o con tu nombre.

     Webs amigas

Opus-Info

NOPUS DEI (USA)

ODAN (USA)

Blog de Ana Azanza

Blog de Maripaz

OpusLibre-Français

OpusFrei-Deutsch


 Correos: Harto ya de estar harto.- Lappso

125. Iglesia y Opus Dei
Lappso :

Lo siento, Harto, pero estoy un poco harto. Si obedeciese a la "moderna moda moderada", tendría que abrir diciéndote que eres un tío estupendo porque para eso eres homosexual, y poco menos que tendría que comenzar estas necias letras  pidiendo disculpas por ser yo mismo un indigno componente del sospechoso colectivo de los heterosexuales.

Pues no me da la gana.

Yo no sé cómo eres tu, y por tanto tu pertenencia a esa minoría no me legitima para hacerte la pelota y solidarizarme contigo, ni admirarte ni nada de eso; ni para eso, ni para lo contrario. Así que te diré lo que pienso de lo que nos dices en tu artículo del pasado miércoles, que fue día veinte de abril. Confío, por cierto, en que mis hábitos sexuales (que os recomiendo a todos) no mermen la legitimidad de mi opinión, ni te lleven a motejarme de "insensible social" (ese sambenito tan estúpido que nos cuelgan por doquier a quienes -¡coño!-  sencillamente vivimos como nos da la gana, y a quien no le guste pues que no mire)...



Verás. la Iglesia Católica tiene una doctrina, un modo de ver la vida concreto y determinado. Un modo de ver la vida que lamentablemente -como todo en este dichoso planeta- se concreta en reglas, en normas: unas positivas (quehayquecumplir) y otras negativas (quehayqueevitar). Entre las segundas,  una dice que el sexo solamente se ha de practicar entre cónyuges (tío y tía) y  de modo tal que no se imposibilite artificialmente la creación de un  nuevo bebé.  Eso no se lo inventaron ni el ProtoPrelaturo, ni Juan Pablo Segundo, ni Ratzinger, ni la madre que los parió. No sé quién se lo inventaría, pero debe ser antiguo e importante. El caso es que la cosa funciona así. Será bonito o feo, pero así es. Y te molesta a ti, y me molesta a mi y le molesta a un montón de gente. Claro. Como que es una puñeta, me lo vas a contar a mi....

Si a ti te gustan los tíos y no las tías, Harto, pues lo tienes chungo para comportarte de acuerdo con ese modo de vivir que predica la Iglesia Católica, a no ser que tengas la (increiblemente admirable, por otra parte) capacidad de refrenar dos aspectos muy diferentes de tu vida:  la de la práctica sexual con otros tíos (que sería un simple pecado mortal, y por tanto soluble: como yo mismo, te confiesas tras cada conquista y ya está); y sobre todo tu tendencia a convivir maritalmente con otro varón, lo cual normalmente incluiría pecados reiterados como el anteriormente descrito; pero significaría no ya cometer uno o muchos pecados (que una o muchas veces se te perdonarían, igual que a mi), sino asumir sistemáticamente un WayOfLife plenamente opuesto al que la Iglesia Católica propone para sus seguidores. No es que llegaras tarde a trabajar con cierta frecuencia; es que te negarías a ser puntual por principio y sin remisión.

O sea: incompatible. Un modo de vida incompatible con la doctrina de la Iglesia Católica. Un modo de trabajar desacorde con la Organización. Vete tu a saber, a lo mejor muy adecuado a lo que Dios en su infinita sabiduría está dispuesto a tolerar; pero desde luego frontalmente opuesto a lo que la Iglesia Católica predica desde hace un huevo de years.

Dicho de otro modo: puedes sentirte con todo el derecho del mundo a que Dios te ame y te proteja y te lleve a gozar con Él al Cielo en cuanto te mueras. Pero no deberías sentirte con derecho a imponer en la Iglesia un mododevivir que es radicalmente incompatible con lo que de toda la vida la Iglesia propone. Como yo mismo no me siento con derecho a hacer que cambien lo que a mi no me mola.

Amigo Harto, léeme los labios: ni tu, ni yo, ni nadie "tiene el derecho" de pertenecer a la Iglesia Católica. Cada cualo cultivaremos en nuestro fuero interno la amistad con Dios, y ya sabes, hasta el rabo todo es toro, hasta el minuto noventa valen los goles, igual al final de todo teníamos razón los quejicosos. Eso no lo sabe nadie. Pero de ahí a que la Iglesia tenga que cambiar porque a ti te gusten mucho los tíos o porque a mi me gusten muchísmo las tías, Harto, seriamente, no se sostiene. Ni siquiera con base en el mito victimario que muchos de tus colegas tratan de imponernos a los demás día tras día en esta estúpida España.  

Y aunque seas homosexual, resulta que las cosas son así. Además, me veo en la severa necesidad de recordarte que expresiones como esa tuya que acusa a Juan Pablo o a Benedicto de "envenenar con su discurso homofóbico las mentes de millones de sus fieles en el mundo" son una perfecta simpleza: primero, porque no tienen el menor fundamento en la realidad (en la seria, claro, que en las pancartas cabe todo); y segundo y más importante, porque ni tu, ni yo, ni nadie es titular del "derecho" a pertenecer a un club cuyas reglas no está dispuesto a respetar. Ni a la Iglesia, ni al Celta de Vigo, ni a nada. La gente de orden, la gente seria, no tiene esas pretensiones. Bueno, sí: José Carlos va a lograr que le cambién para él solito las práxises, el catecismo interno y hasta la carta del padre de febrero del setentaytres. Vamos anda, tío.

Y si no me gusta, pues me voy. Y si no te gusta, pues te vas. Y si tan seguros estamos de llevar razón, entonces el día del juicio final nos vamos a descojonar de risa -eso sí- cada uno por motivos diferentes. Pero mientras tanto, a apechugar y a no sentirse titular de presuntos "derechos", que aquí cada uno tenemos nuestro corazoncito. Homos y héteros.

Y desde luego no voy a edulcorar mi pensamiento por el hecho de que se dirija en esta ocasión a un miembro de un Colectivo tan progresista y tan políticamente ambicionado como el tuyo.

Y ahora, que quien quiera se cabree conmigo. Pero es que "harto ya estoy harto, ya me cansé" de muchas cosas.

Lappso.




Publicado el Friday, 22 April 2005



 
     Enlaces Relacionados
· Más Acerca de 125. Iglesia y Opus Dei


Noticia más leída sobre 125. Iglesia y Opus Dei:
El Opus Dei, Instituto Secular (III): Conmemorando las bodas de plata.- Idiota


     Opciones

 Versión imprimible  Versión imprimible

 Respuestas y referencias a este artículo






Web site powered by PHP-Nuke

All logos and trademarks in this site are property of their respective owner. The comments are property of their posters, all the rest by me

Web site engine code is Copyright © 2003 by PHP-Nuke. All Rights Reserved. PHP-Nuke is Free Software released under the GNU/GPL license.
Página Generada en: 0.141 Segundos