Publicado en Religión Digital

RD ha tenido acceso al informe del psiquiatra del ex alumno del Gaztelueta

Doctor Iñaki Viar: “El paciente sufre un síndrome post-traumático ocasionado por el repetido ataque a su integridad corporal”

El experto asegura que el relato del abusado es “coherente, veraz, sin contradicciones y sin fabulaciones”

José Manuel Vidal, 29 de noviembre de 2015

(José M. Vidal).- El alumno del colegio Gaztelueta, supuestamente abusado por su profesor-tutor, sufre un "síndrome post-traumático", ocasionado por "el repetido ataque a su integridad corporal", por las continuas "humillaciones" a las que le sometía el profesor y por las "burlas de sus compañeros" que el mismo docente propiciaba. Éstas son algunas de las consideraciones que aparecen en el informe psiquiátrico del doctor Iñaki Viar, al que ha tenido acceso Religion Digital...

El informe del psiquiatra, que trata al chaval desde el año 2012, cuando supuestamente fue abusado en Gaztelueta, diagnostica que "la enfermedad de X se corresponde, por el encadenamiento lógico de hechos sufridos y síntomas manifestados, con un Síndrome post-traumático".

Un síndrome debido a los abusos, a la humillación y a las burlas, así como a la "degradación, insultos, infamias y todo tipo de vejaciones, lo que constituye el escenario traumático en el que se desarrolla su vida durante aquellos años".

El informe del experto avala claramente y sin ningún género de dudas que los abusos sufridos, acompañados del acoso por parte del profesor y de sus propios compañeros, producen en el supuesto abusado "episodios recurrentes de su enfermedad". Por eso, sufrió "un retraso escolar importante y la imposibilidad de llevar la vida normal de un joven, hoy de 18 años, por la tendencia al aislamiento que aún sufre".

El doctor Viar explica que "en los episodios del Síndrome Post-traumático se efectúa una actualización de los hechos que causaron el daño y que vuelven a reproducirlo, constituyendo una repetición que es su característica principal. El traumatismo vivido por X ha producido una ruptura, una falla en el tejido del psiquismo -previamente normal- que es la causa por la que periódicamente se produce el derrumbe de su subjetividad, de su ser, que se manifiesta en el conjunto de síntomas que sufre. La patogenia de este proceso se puede explicar porque el traumatismo ha producido una alteración del mecanismo del olvido, lo que permite el retorno repetido del recuerdo traumático que le enferma".

Es decir, "el daño psíquico permanece y vuelve a actualizarse en ocasión de diversas contingencias que desencadenan el recuerdo traumático, que consiste esencialmente en que el paciente se siente reducido a un objeto sometido a la voluntad caprichosa de otro. En esta indignidad -ser tratado como objeto, y no como sujeto- consiste el traumatismo del que X padece las secuelas".

¿Cómo va a evolucionar la enfermedad del abusado?

El psiquiatra asegura, a este respecto, que "no es posible hacer con certeza un pronóstico sobre la evolución de la enfermedad de X. El objetivo del tratamiento es que consiga reencontrarse como sujeto que tiene derecho efectivo a su integridad, y en eso tratamos de ayudarle a encontrar recursos con los que superar el daño sufrido. Confío que el desarrollo anatómico y fisiológico de X coadyuve a su recuperación".

El doctor Viar da fe del relato de los hechos que el chaval hizo desde el principio y mantuvo durante todos estos años. "Según su propio relato, el paciente X fue victima, durante el curso 2008-2009 de trato degradante y actuaciones de carácter sexual por parte de su profesor y tutor, X, y otras actitudes que se pueden calificar de acoso escolar por parte de sus compañeros de clase, en el colegio al que acudía entonces".

"Trasladado a otro colegio, en el curso 2010-2011, sufrió́ acoso por Internet por parte de sus antiguos compañeros. Todo lo relatado ocasionó, hace 13 meses, el desencadenamiento de un síndrome caracterizado por un cuadro de ansiedad, inquietud psicomotriz, con desplazamientos sin sentido, alucinaciones visuales, dolores corporales, movimientos de tipo convulsivo y alteraciones del sueño".

Pasado un tiempo, el doctor cuenta que el chaval "se restableció́ y comenzó́ el siguiente curso con normalidad escolar. Con todo, clínicamente persistía la tendencia al aislamiento causada por el temor insuperable a encontrarse con su tutor o sus compañeros, lo que impedía la normalización de su vida social. Esto se mantiene, con mayor o menor intensidad incluso en los períodos en que remitían los otros síntomas".

"Posteriormente, el paciente ha sufrido el desencadenamiento de episodios similares durante todos los cursos. El ultimo, este curso 2014-2015, en octubre, a raíz de escuchar algunos comentarios realizados por un profesor en la clase referidos a la cuestión de los abusos a niños".

El informe del doctor Viar añade: "En este último episodio ha presentado principalmente un estado depresivo, con marcada inhibición para todo tipo de actividades, desde moverse hasta hablar. El paciente refiere pensamientos recurrentes con contenidos de vergüenza, culpabilidad y temor -a pesar de vivir ahora en otra ciudad- a encontrarse en cualquier lugar con el tutor y con sus compañeros de clase.

"Así́ explica su negativa a salir de casa e ir al colegio. Asimismo, refiere dificultad para dormir que cree se debe a las pesadillas que tiene cuando duerme. En estas pesadillas se repite un patrón basado en que su tutor va hacia eél y siente que no puede hacer nada. La pasividad que siente ante el otro en el sueño es vivida con tal horror que se despierta. También sueña que se encuentra ante gente que se burla de él y le acosa".

"Un relato coherente"

Un relato nada fácil, el que hizo el abusado al doctor. "X ha ido relatando, con gran esfuerzo y con mucho tiempo, las situaciones profundamente traumáticas a que fue sometido y que, sin duda, han causado su enfermedad. Su dificultad para decir lo que le ocurrió́ es debida a que evocar esas situaciones le produce temor y ansiedad, precisamente por el carácter traumático que tienen para él".

El doctor Viar descarta cualquier tipo de fabulación del abusado. "Su relato, aunque con interrupciones por sus dificultades para narrar los hechos, ha sido siempre coherente y sin contradicciones, y he podido constatar la veracidad de su enunciación, siempre adecuada y conforme al afecto que le producía lo relatado, lo que me permite descartar cualquier fabulación".

El informe del doctor pasa a contar, a continuación, cómo comenzaron los supuestos abusos por parte del tutor del colegio Gaztelueta. "Refiere X que, en el curso 2008-2009, su tutor comenzó́ a dirigirse a él con alusiones amenazadoras respecto a que se iba a enterar de cómo era él. Como relata X, 'a partir de un momento todo se empezó́ a torcer', refiriéndose al cambio de actitud de su tutor y de sus compañeros de clase. Su tutor manifestó́ una conducta inquisitiva hacia él, preguntándole sobre su familia y amigos con premiosidad y exigiendo más detalles de su vida".

"También le hacía comentarios de descrédito hacia sus padres, al tiempo que se le ofrecía para tratar con él todo tipo de cuestiones. El tutor comenzó́ a llamarle a su despacho con una frecuencia inusitada en relación a los demás compañeros. Asimismo, comenzó́ a tener gestos de carácter seductor, como acariciarle la mano al darle alguna golosina. En sus visitas al despacho, que llegaron a ser de varias veces por semana, a menudo el tutor bajaba las persianas y cerraba con llave la puerta. Lo que a X le inquietaba. El tutor comenzó́ a realizar una intromisión en su vida sexual..."

Y, a continuación, narra los supuestos abusos de carácter sexual a los que fue sometido su paciente y que, por su escabrosidad, omitimos. El informe del doctor sigue así: "Este conjunto de prácticas fueron precedidas y acompañadas de otras actuaciones humillantes y degradantes por parte del tutor hacia X, mediante comentarios despectivos delante de su clase si tenía algún fallo, alusiones a una presunta homosexualidad de X, también delante de los demás alumnos, y la imposición de castigos humillantes. Es decir que el tutor inducía a los compañeros de X a burlarse de él".

¿Qué buscaba con ellos el presunto abusador? El doctor Viar lo tiene claro: "Considero que las actuaciones del tutor, para provocar la humillación de X, tenían como objetivo debilitar su actitud moral, para así facilitar su sometimiento a sus prácticas sexuales".

Con la agravante de que el abusado "se encontraba totalmente sometido a su abusador por su autoridad como tutor y por la confianza de sus padres en la institución religiosa que regenta el colegio, de tal modo que parecía inverosímil que tales hechos se pudieran producir allí́". La institución a la que se refiere el informe es el Opus Dei.

Además, "X temía que, si se lo decía a sus padres, su tutor podría tomar represalias contra él. X se sentía totalmente impotente, para evitar la repetición de estos hechos, y vivía la angustia cotidiana de si ese día el tutor le llevaría al despacho, como una amenaza a la que fue sometido durante un curso y parte de otro. Es decir, como mínimo durante varios meses".