Opuslibros - Entre la chanza y la risa. Para Satur.- Lvdovicvs

Lvdovicvs :

para Satur

Dice Qohelet, mi querido Satur, que más vale oír reproche de sabio que alabanza de necios, y añade, porque el halago atonta al sabio, y el regalo pervierte al corazón. Tiene razón. Es así. Pero también es verdad que uno corre el riesgo, por seguir consejos como el anterior, de no decir cosas que de verdad siente y que en conciencia sabe que tiene que decir.

La verdad es que no he tenido tiempo de leerme con calma cada uno de los rincones de la web y ver si ya alguien te ha dicho algo similar. Si ha sido así, pues ya sabrán, todo, perdonar la repetición; y si no, va pues con todo el cariño y todo el amol.

En mi país (cercano y lejano al tuyo) hay una especie de refrán que apostilla otras frases: entre la chanza y la risa. La gente, al decirlo, lo que intenta explicar es aún entre las bromas, o las frases campechanas o aquello que resulta gracioso siempre hay algo interesante, siempre hay algo sensato, siempre hay algo en lo que vale la pena detenerse unos instantes y pensar.

A mí, Satur, es que me han dado las tantas de la madrugada leyendo algunas de las cosas que has escrito, y me has hecho muy pero que muy feliz. No me pregunto qué hay más atrás, ni por las cosas que hay en tu alma. Por no preguntarme no me pregunto ni quién eres tú, ni dónde estás, ni qué haces, ni quién es La Piedra (que debe ser más simpática y más guapa, y que te debe querer un montón) lo que sí sé es que a mí me has hecho descansar (descansar mentalmente) y reírme como no tienes una idea. Y eso... es eso valioso.

Anoche andaba yo un poco (o un mucho) desesperado porque por andar con el grupete ese estupendo de amigos, se me hizo tarde para preparar la homilía del Domingo, a esas horas –las tantas- me encontré con algo tuyo, escrito hace meses, que me ayudó mucho:

"Y es que cuando se intenta vivir una vida cumpliendo 'Acciones Elevadas del Espíritu', pero desde un estado de autosuficiencia, de engreimiento, de acritud, de exclusividad de alma elegida, tarde o temprano esa alma acaba en la mentira, en la decadencia y en la falsedad farisaica. Más vale arruinarse con alma de santo, que hacer obras de santo con alma ruin. La santidad no es estirada ni altiva, sino que se inclina con amor sobre cualquier necesitado. No sólo sobre los del IESE, o los forrados de pasta gansa, o los aristócratas, o los grandes del mundo. Atontados, que no os enteráis. Y cuando veáis esa penícula que tanto vais a de flipar, La Pasión, pues os aplicáis el cuento: un Dios que tomó la forma de un esclavo".

Gracias, Satur. Gracias. Un montón de gente se ha beneficiado de ésta reflexión. Naturalmente he omitido los nombres concretos (el de la escuela esa de negocios tan famosa aquí y allá; aquí se llama de otro modo) pero he dicho la idea tal cual, bueno, quizá desmenuzándola un poco. Y la gente –mi gente; gente sin mucha educación, sin mucha cultura, sin nada de glamour, pero buenísima- la ha entendido. Ninguno estamos exentos de la tentación de la soberbia, del orgullo y de la altivez. Y mejor prevenir que lamentar. Otro refrán.

Luego, cuando expusimos a nuestro Buen Jesús un rato en la custodia y se hizo el silencio en la Parroquia, pensaba en todos los que de una manera u otra participan en esta web. Pensaba en Javier y en lo mucho que nos ha gustado a todos su última colaboración. En la niña ésta Nicole que tan revuelta debió quedarse por dentro y por fuera. En Paco Feliú que, si no he leído mal (leí aprisa, eso sucedió) ha dicho recientemente algo así como "siento mi primer post". Y luego en todo esa montón de gente maravillosa que se pasea por ésta web, y lee y medita, y se calla y apoya, y critica y se rasga las vestiduras y dice que cómo es posible o –la contraparte- que enhorabuena o que... qué-se-yo, ¡tantas cosas!... ¡vaya que he pensado en ustedes en esta tarde de domingo!

Eso, querido Satur. Ciertamente el incienso y las alabanzas de desagravio sólo para el Santísimo Sacramento, y pa’nadie más, however, que dicen los gringos, no quería irme hoy a la cama sin dar las gracias. Sin darte las gracias. Me has sacado de un apuro. Me has hecho descansar mucho mentalmente, y estoy seguro que al traer a colación esa reflexión tuya mañana que los orejas (tipazos, como decimos en mi país) pongan mi post en la web, ayudarás a alguien más.

Con un abrazo de ésos sinceros y calurosos,

Lvdovicvs

Publicado el Monday, 12 July 2004