zartan :
Querido Javier:
No tengo tu dirección ni tu correo, por eso te escribo en esta página web, no sé si la lees pero seguro que algún conocido te puede imprimir esto y entregártelo.
Como llevas 27 años trabajando en la Universidad de Navarra y declaras sin empacho que eres numerario, deduzco que no eres un recién pitado y que más o menos llevas treinta años como numerario así que voy a decirte lo que pienso sin dar rodeos, sin endulzarte las cosas: al pan pan y al vino … sin pensarlo dos veces.
En primer lugar quiero decirte que con tu blog y con tus vídeos en Youtube has hecho un gran daño a la Obra. Date cuenta que si lo han reseñado en OpusLibros (donde solo tienen cabida el rencor y la amargura) es porque realmente son de lo peorcito que puede hacer un numerario. Piensa que, atacando a la Universidad, que es obra corporativa, estás atacando a la misma Obra. Por lo que dices se puede deducir que lo importante no son las personas sino las instituciones, las personas en el fondo dan igual -son sustituibles- mientras que las instituciones son las que permanecen en el tiempo. Las clases que tú dabas en segundo y tercero hoy las da otro profesor que, pasado el tiempo, será sustituido por otro nuevo. ¿Te das cuenta de lo inútil de tu pataleo?
Además, Rosalía debe ser de nuestra misma prelatura (de esto no estoy seguro por aquello de la natural separación entre los fieles colaboradores de las prelaturas personales) por lo que tus declaraciones transmiten la idea de que nuestras hermanas toman decisiones serias basadas solamente en antipatías o simpatías personales.
¿Cómo se te ocurre meter en el baile a Ignacio C.? Y, encima, dejar claro que era el director de tu centro por lo que tenía información sobre tu línea de defensa en contra de lo decidido por la Universidad. Lo único que te ha faltado ha sido decir que era con quien hacías tu charla fraterna, hubiera sido el colmo de mal espíritu por tu parte. Alguien podría entender que la charla fraterna tiene como finalidad primera el bien de las instituciones (Obra, Universidad) y como segunda el bien de quien hace la charla.
Además tienes otra metida de pata grave: al hablar del Decano comentas que, por haber vivido los dos en el mismo centro, tienes con él una antigua amistad que es cordial y amigable. ¿Cómo se te ocurren semejantes adjetivos? Tenías que haber dicho algo como “lazos mas fuertes que los de la sangre” o “amor fraterno” o algo por el estilo. Si puedes, imagínate lo que sucedería si yo esta noche durante la cena con mi mujer y los churumbeles les dijese: queridos todos, para seguir el ejemplo cristiano de una venerada institución de la Iglesia, a partir de ahora, el trato entre todos nosotros será cordial y amigable. Los niños seguro que pensarían que de tanto pasar las noches de claro en claro y los días de turbio en turbio se me había secado el cerebelo, mi mujer no pensaría nada pero de la primera patada me pondría fuera de la casa.
Javier, lleva todo esto a la oración y te darás cuenta que es fruto de tu soberbia. Pide humildad, retira todo lo que has puesto en Youtube y en tu blog, rectifica y repara. Así dejarás de hacer sufrir al Padre y de hacer daño a nuestra Madre Guapa.
Con afecto,
Zartan de los Nomos
Publicado el Monday, 03 March 2014
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