Cuando leo escritos como los de Ponciopilatos, una madre atribulada por los pesares de su hijo, no me queda otra que rezar para que en el Opus Dei no se sigan dando hechos como los que ella narra y de veras, acompañarla en su dolor.

Creo que nunca he negado que en Opus Dei haya personas enfermas, inclusive he llegado a escribir cómo me comporto o cómo nos comportamos, las que estamos en nuestro sano juicio en mi centro, con las personas que andan mal de la cabeza. El tema enfermedad mental entre algunos miembros que pertenecen al Opus Dei lo he asumido hace mucho tiempo, no es ninguna novedad. Rezo por aquellos enfermos, idos, o que se encuentra actualmente como un auténtico guiñapo en el Opus Dei como consecuencia de alguna enfermedad mental...

A las personas que escriben en Opuslibros y que les parece que ofendo, les digo que no es mi intención ofender, y pido disculpas nuevamente si mis palabras han ofendido a alguien. A quienes les parece que no soy coherente, que no tengo dignidad y carezco de elegancia, a ellas les doy las gracias por hacérmelo ver, intentaré con todas mis fuerzas no caer en esa conducta y también rezo por ellas para que Dios les de las luces necesarias para saber discernir a la hora de juzgar el mal ajeno.

A quienes siguen cacareando hechos tan increíbles como el que “ayer” a una niña muy allegada le dijeron que Dios le perdonaba 500 días de purgatorio si se hacía numeraria y que, además, lo había dicho san Josemaría, a esa persona le digo, ¡por favor! Si quieres seguir escandalizando, búscate otros ejemplos que suenen ¡más verídicos!

Hay quienes sangran al leerme, pese la advertencia que he hecho de no me lean, pero también hay quienes me agradecen! Porque leerme hace un bien a su alma! Gracias a Dios! Y para que vean que no me lo invento transcribo sus palabras, auténticas: Gracias Calandria, quien quiera que seas, por el servicio que nos prestas! Y aquí hay alguien más que me agradece, “en serio”, además: Y me da gusto que seas feliz y todas esas cosas que dices. En serio. Un gustazo.

El Opus Dei es complejo de entender, efectivamente, pero basta estar un poquitín cerca de Dios y tener buenas intenciones para comprender su naturaleza a cabalidad. Comprendo muy bien que quien no está cerca de Dios no pueda entender la Obra, inclusive, muchas veces las cosas y designios de Dios son incomprensibles para quienes tratamos de estar cerca de Él.

Y, bueno perdono de todo corazón a quienes me juzgan de mentirosa, terca implacable. Dicen que no soy sudamericana por mi forma de escribir que no corresponde a los giros propios del español iberoamericano… Olé! Cuando menciono los hechos de hace 30, 40 o 50 años es porque quien los escribe lo hace en primera persona y dice frases como “allá por años 60’”, mis dos dedos de frente me indican que la persona que escribe como protagonista vivió estos hechos hace 50 años. Esto no impide que ahora mismo afirme, nuevamente que esos hechos no me ha tocado vivir a mí, yo he vivido otras cosas día a día, mes a mes y año a año en el Opus Dei. Y a quien escribe tachándome de mentirosa y terca le pido que no sea tan quisquilloso y que no busque los tres pies al gato ni el pelo al huevo.

En cuanto a la dirección espiritual, mantengo lo que dije en mi correo del 14/1, lamento si hay quienes recibieron otra “lección” equivocada, eso indica que no todo es perfecto en el Opus Dei, también hay equivocaciones y muchas. Yo agradezco de veras haber recibido una formación muy en la línea de lo que debe ser.

Me tomé el trabajo de copiar de la RAE el término catecismo:

catecismo.

(Del m. or. que catequismo).

1. m. Libro de instrucción elemental que contiene la doctrina cristiana, escrito con frecuencia en forma de preguntas y respuestas.

2. m. Obra que, redactada frecuentemente en preguntas y respuestas, contiene la exposición sucinta de alguna ciencia o arte.

3. m. catequesis (‖ lugar o reunión donde se imparte la doctrina cristiana).

Para quien me tachó de numeraria VIP por tener el “privilegio” de poder escoger fecha del curso anual copio unas palabras de Solans quien se presenta en Opuslibros como numerario “activo”:

En mi casa nos presentan la lista de cursos anuales disponibles, para que cada uno solicite el que más le convenga; habitualmente se concede. Esto es así desde hace ya bastantes años. Al menos las fechas del curso anual tienen que coincidir con las de las vacaciones que cada uno tenga en su trabajo. En los centros de gente joven hay que cuadrar más cosas, sobre todo asignaturas internas y atención de las actividades de verano, por lo que la posibilidad de elegir curso anual está más restringida; también los sacerdotes tienen menos posibilidades de elegir a la hora de asignarles un curso anual. No somos Numerarios VIPs, hay cosas que cambian en la Obra y hay criterios distintos según la edad de la persona; al menos desde mi punto de vista.

Por último y aquí termino, a todos lo que se irritan al leer las opiniones y posturas de una numeraria, sigan los consejos que EBE da en su post del 16/1.

Un abrazo a todos

Calandria