Gracias de todo corazón a quienes habéis aportado ideas o posibles soluciones ante nuestra situación familiar.  Estamos más que desorientados. Muchos de ustedes saben lo que pueden llegar a sufrir unos padres por sus hijos, más aún cuando el sufrimiento es provocado, entendemos, injustamente.

Somos católicos practicantes, orgullosos de nuestra fe, pero no conocemos nada, o muy poco, de vida religiosa, vocaciones, etc. No tenemos familiares sacerdotes ni monjas. Para unos padres, sus hijos son el don más grande con que Dios puede bendecir el amor. No sabemos porqué extrañas razones nos "topamos" con el Opus Dei y comenzamos a vivir un particular calvario. Creíamos haber elegido un buen colegio para los nuestros, y por aquí ha empezado todo.

El domingo pasado hablamos con nuestro párroco después de la misa, que nos recibió gentilmente. Hemos puesto en su conocimiento la situación de nuestro hijo. Nos ayudará y acompañará a una entrevista con el señor Obispo, que ya ha requerido, para que pongamos en conocimiento de la autoridad eclesiástica nuestro problema. En una semana, podremos entrevistarnos con el Obispo. El párroco nos explicó que nuestro caso no es excepcional. Desde aquí queremos agradecer el tiempo y el interés que está poniendo en ayudarnos.

A todos ustedes, gracias igualmente. Les informaremos de las gestiones.

Por favor, no dejen de ayudarnos (nuestro hijo, que no va a misa desde el regreso de la convivencia con el Opus Dei, no quiso ir a hablar con el párroco, pues evita rememorar lo que ha vivido).

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