Extraordinaria labor de Guillaume al traducir lo que constituye el Ceremonial del Opus Dei.

Me he quedado helado recién hoy enterarme lo que dije al hacer la fidelidad, de rodillas frente al sacerdote, el Director y otro numerario (testigo)¡Qué sabor tan gnóstico y masónico! Si leemos algún texto de la francmasonería en su consagración a los altos grados, es muy semejante. Recuerdo aún cuando hice la ceremonia de la Fidelidad que me dieron el librito "Ceremoniale" para que lo leyese y llevara a la oración antes de hacer la ceremonia. El latín nunca se me dió y no tenía diccionario a la mano, menos aún una computadora portátil así que pedí al Director una traducción para hacer las cosas más sencillas. Me dijo: "no es necesario que llegues a tanto detalle, es parte de nuestra vocación" ¿Y así esta ceremonia sin saber qué es lo que dices y te comprometes tiene valor jurídico vinculante con la Prelatura? Por mi vida que he sido durante décadas numerario sin saberlo, únicamente por puro quererlo. Con estas explicaciones de Guillaume, los aspirantes a numerarios tendrán que pensarselo bien.

Nicanor
nicanor.wong@gmail.com