Agustina:

La -no tan velada- amenaza del Opus Dei por la publicación en Opuslibros de los documentos secretos daría risa, si no fuera que esta gente es capaz de cualquier cosa, como lo demuestran a cada paso. De todos modos, lo mejor que se puede hacer en no darle importancia: hay un larguísimo recorrido judicial entre que uno considera que es el titular de un derecho tan intangible, y poder demostrarlo y que eso genere a su vez una prohibición de poner al público tal material.

Hay en juego cuestiones que van desde el hecho de que el mismo Opus Dei admite la publicación de las obras de su fundador en webs que les son adictas (relibros, por ejemplo, entre muchas otras), hasta cuestiones de interés cultural e histórico que hacen difícil que encuentren el resquicio que les permita tapar la boca de un editor, sin comprometerse ellos mismos a editar y sacar a la luz.

En fin, comunicaciones como la que has recibido, terminan siendo más reconfortantes que amenazantes, del momento en que los obligan a admitir que existe documentación que no desean ver publicada. No estaría de más que alguna instancia oficial de la Iglesia supiera de este intento concreto de presión, porque ya no se trata de que al Opus le molesten las opiniones de los que no les son adictos, sino de que reconoce, indirecta pero claramente, que le molesta ver publicados ciertos textos.

Un saludo y adelante con esta "Opus Agustinae", que aunque no la haga directamente Dios, como pretendidamente la de ellos, seguro que Dios la está bendiciendo y protegiendo.

Martys