Querida Calandria

Cuanto me apena tu escrito,  en tu afán de ser simpática escribís en forma de agradecimiento un conjunto de ironías. No me hacen mella pero me da mucha pena que una persona que dice  estar buscando la santidad caiga en tantas faltas de caridad. Nos decís que le pedis a Dios humildad, quiero animarte a que sigas haciéndolo, no estás errada al pedirla con insistencia.

Quería decirte algunas cosas de tu escrito, van entre comillas tus palabras.

Cuando nos decís que sos “una mujer que trata de vivir una entrega de amor a Dios en medio del mundo (aprovecho para decir que esto es posible, posibilísimo, ahora)” no sos conciente que el motivo por el que nos fuimos de allí fue justamente que dejó de ser entrega de amor a Dios para ser entrega de amor al opus y que no necesitamos que nos confirmes que es posible porque sabemos perfectamente que a veces no.

No odiamos “(lo dicen los que no nos quieren, lo dicen los Opuslibros)”  vuelvo a decírtelo: no te equivoques no odiamos y como vos aprendimos a  “amar a quienes odian”.

Cómo podés asegurar de opuslibros: “esta página web que no agrada a Dios porque va contra su Obra” cómo podés saber lo que agrada o no a Dios. Solo El lo sabe. Además das por cierta una premisa que no es absoluta para otros: decís que la obra es de Dios y yo te pregunto: ¿la obra es de Dios?.

Calandria, qué te mueve al escribir?

Un beso a todos

MMZ