Voy muy a trancas y barrancas de tiempo, pero de hoy no pasa que apoye a “Tolosa”.

Tolosa, tienes todo mi apoyo y mi aplauso. Me parece muy bien que denuncies, sólo lamento que no lo hayas hecho antes porque creo que lo habrás pasado peor mientras pensabas si debías aguantarte y olvidar o denunciar. 

Recuerdo que a ti, en un escrito anterior tuyo y a Luci ya os dijimos en esta web ¡cuidadín! No había que relacionar los abusos sexuales que se pudieran dar en el Opus Dei con el Opus Dei, porque no era lo habitual...

Como dice (o creo quiere decir Dionisio), la mayor o menor relación debería venir determinada por el número víctimas que aparezcan (y para ser objetivos, habría que tener en cuenta el % de incidencia en el grupo de población del que hablamos, esto lo digo yo) y no a priori considerando que es imposible o casi, porque no se sufrieron ni vieron (con luz y taquígrafono suelen darse este tipo de abusos).

¿Cuántas familias no sabían que tenían un abusador en casa? (los casos van desde viviendas y familias sin hacinamiento, hasta donde se da un hacinamiento tal, que hace muy difícil la intimidad individual).

Por otra parte, del "sermoneo" que se da a los instructores de un club juvenil del opus, no se puede deducir que es imposible que existan abusos, ni que tengan que darse exclusivamente en los clubs juveniles (con o sin sermoneo, todos sabemos que los abusos sexuales son ilícitos y sin embargo se cometen).

A todos nos importa nuestra imagen y por consiguiente, la de aquellos con los que nos hemos relacionado voluntariamente a lo largo de nuestra vida ("¡ojo!!! que no soy tan tonto/a, siempre tuve vista al elegir donde me metía, pertenecí a esto... pero esto ¡no es tan malo!). Es más fácil y más corto que decir ¡me equivoqué! No lo supe ver, aunque también se daban circunstancias que dificultaban la visión.

En general, cuanto más abominable es el delito, más lo negamos en quienes han tenido alguna relevancia en nuestras vidas, hasta el punto de no querer verlo cuando está dentro de nuestra propia familia (no lo digo por vuestra ex familia sino por la mía).

Diría más. Diría, que incluso inmediatamente después de los hechos, la víctima, suele negárselos a sí misma, también lo niega ante los demás por vergüenza y a mayor nivel cultural y posición social, resulta más difícil reconocerlo porque significa reconocer que, con más medios, no hemos sido capaces de darnos cuenta en su momento.

Sirdan dice... “que surge la tentación "de cazar" por aquí a la opus...". A mí no me ha surgido esta tentación, pero pueden levantar la mano quienes hayan pensado inventarse un caso de abusos sexuales para atribuírselo al opus y así podremos contar cuantas tentaciones surgen.

Al contrario que a la Iglesia, a mí me importan las víctimas y creo que hay que darles la oportunidad de poder romper el miedo y la vergüenza por algún sitio antes de decirles, "oye, no des tu testimonio que aquí no tienes cabida".

Pienso que cuando los agresores pertenecen a grupos o es gente de la que nunca se sospecharía, hay que denunciar más veces, más alto y más claro, porque lo inesperado e increíble, hace más daño que lo previsto y verosímil. ¡Bravo por ti, “Tolosa”!.

Sin pretender ofender, en la Iglesia católica, tampoco eran en absoluto "habituales" los abusos hasta que se rompió el miedo y salieron (casos aislados dice Dionisio, en menor grado dice Sirdan), sin embargo a mí me parece que ha sido un "uso" demasiado frecuente con total desprecio de las víctimas.

(Claro, que yo hago un cálculo a ojo teniendo en cuenta el número de niños abusados por el grupo de población "del clero", que es el que está reconociendo la Iglesia y del que estamos hablando; a ojo, ya sé que el cálculo no se hace, pero no me parece que el % de víctimas del grupo "clero" sea inferior al % víctimas del grupo "no clero";

- y si cogemos el % de víctimas del grupo "clero" y el % de víctimas del grupo "otros educadores", creo que tampoco saldría "baja incidencia", no sé si han salido publicados estos datos, no los he visto;

- sólo he visto a la Iglesia diciendo "baja incidencia", sin fuente del estudio ni datos comparativos;

- a ver si es que por casualidad, a la Iglesia pudiera interesarle la "baja incidencia", para que no se puedan relacionar los abusos a menores con el celibato y poder seguir sin bajarse de su burro.

Porque... ¿quién ha hecho el cálculo de la menor incidencia? ¿La Iglesia? (a ver si resulta que lo ha hecho a ojo y "sin datos" como lo hago yo).

Pues ¿por qué no dejamos que la persona que está recogiendo datos sobre posibles abusos en el opus dei los recoja, que las víctimas que quieran se expresen aquí - sería deseable porque podríamos apoyarlas, los caminos difíciles se recorren mejor acompañados - y después concluimos sobre la incidencia? Como se prevé mínima, no romperá los esquemas de nadie.

No estoy de acuerdo con lo que creo sería el ideal de Sirdan, escucharnos antes de escuchar, una especie de censura de testimonios de abusos, como si no hubierais tenido suficiente con la censura que os aplicaron, aunque daría la razón a Sirdan en el caso que hayan surgido "tentaciones" de inventar testimonios con abusos sexuales para atribuírselos al Opus Dei.

Mi aplauso también para el valiente de Nicanor, un maestro del miedo roto. Su testimonio en imágenes me parece fabuloso y su generosidad con el tiempo, entre vídeos y escritos... una pasada. ¡Felicidades Nicanor!

Salud y escuelas que enseñen que cada palo debe aguantar su vela, aunque sea un palo querido.

Un abrazo,

Isabel Caballero