aldeano :
Querido Felipep,
contesto un poquito más tarde que el resto porque quería reposar un poco antes de hacerlo... para hacerlo algo mejor que siempre, espero.
Primero, te pido, como los demás, que olvides ¡¡por favor!! la idea de querer morirte. Dios nos ama a todos, pero no sólo Dios... seguramente conoces gente fuera de la Obra que te quiere y que, si les pides ayuda, te la darán. Quizás incluso haya gente dentro del Opus Dei que te quieran, pero, por sanidad mental, es mejor que este tránsito lo lleves a cabo lo más alejado posible de ese ambiente, porque, como te das cuenta, te está haciendo daño.
Cualquier cosa, aquí estamos. Pídele a Agustina el mail de cualquiera de nosotros, que te ayudaremos con lo que podamos.
Segundo, un consejo que me dio alguien muy sabia (y que repito aquí mil veces). Caminar (¡no correr!) por parques y acercarse a la naturaleza. Parece una idiotez, pero permite calmar el espíritu para tomar decisiones... o... simplemente para calmarlo. Por favor, no te lleves el Santo Rosario ni nada que tenga que ver con las prácticas del Opus; hazlo porque te hace bien... al principio, oblígate; después ya no será necesario. Por supuesto, esto no es la píldora mágica que te sacará de todos los problemas, pero te ayudará a sobrevivir algo mejor en medio de la tormenta.
Acerca de tu posición de "estatus" en la Obra... bueno... yo no sé qué decir al respecto. Te van a despedir si te vas, eso es evidente... Supongo que lo más sensato es crear el colchón para caer suave cuando lo hagan. Pero olvídate del escándalo: las obras corporativas son, en ocasiones, tal estafa escandalosa que hasta puede que te salves de verte involucrado hasta en algún juicio si te vas.
Un abrazo enorme y muy fuerte,
aldeano
Publicado el Wednesday, 27 January 2010
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