Queridas orejas y toda la web,

 

aunque ya no escribo últimamente, no podía dejar de mandar una afectuosa felicitación a todos los amigos -y no amigos)- de Opuslibros. También para ti, Miriam Posadas, aunque a tí te "trabajo" más en detalle al final de mi mensaje.

 

La verdad es que ha sido un año maravilloso, en el que he tenido el honor y la alegría de comer junto a Agustina y otros amigos de la web; he ido siguiendo las cada vez más profundas aportaciones de los cada vez más numerosos participantes de Opuslibros; he disfrutado con las noticias de la investigación que la Santa Sede ha iniciado para terminar con los abusos de la secta; me ha encantado comprobar que cada vez se cierran más centros y clubes, que los centros de estudios están cada día más vacíos y que, cada año que pasa, la edad media del opus va volviéndose más decrépita hasta el punto en que los clubes de niños ya los comienzan a dirigir solterones en edad legal de prejubilación.

 

Felicito asímismo a todos los que este año 2009 os habéis liberado de la mentira del Opus Dei, una mentira de dimensiones cósmicas que dejará cortos a los fraudes más torpes de la historia reciente. Felicito a los que van a pasar su primera navidad en felicidad y libertad.

 

Felicidades también para los pobres numerarios y numerarias, agregados y agregadas que, tras la anodina celebración de la navidad "en familia" (mientras sus familias de verdad los echan de menos), prepararán una pequeña maleta  con unas mudas, la agenda, el paquete de tabaco, el bote de antidepresivos, etc., para ir a un todavía más anodino curso de retiro. Pido a Dios que, como nos pasó a muchos otros, ese curso de retiro les sirva para ponerse frente a frente ante Jesucristo y tomar la decisión de no seguir sirviendo a una organización que desobedece a la Iglesia desde su inicio, que miente y tortura las conciencias de tanta gente. Felicitaciones, como no, a los que estos días están de curso de retiro o de curso anual y, cerrados en sus habitaciones, se conectan a internet con sus ordenadores personales y se ponen al día de la correspondencia de Opuslibros entre meditación y meditación.

 

Finalmente no podía  resistir enviar una felicitación especial a Miriam Posadas.

 

Miriam, verás:  aquí no hay problema con que firmes con tu nombre real pues ya sabes que nadie te va a hacer nada. Somos inofensivos porque no estamos resentidos. Estamos dolidos, eso sí, de que sigáis mintiendo al Vaticano, de que sigáis minitendo a los obispos, de que sigáis desobedeciendo a la Iglesia, de que sigáis utilizando a Jesucristo para vuestros rollos, de que sigáis embaucando a adolescentes, de que sigáis robando a los Estados, de que sigáis machacando a las numerarias auxiliares, de que sigáis hablando mal de los sacerdotes diocesanos y de que hagáis perder la fe a tanta gente.

 

También quiero decirte que los que firmamos con pseudónimo, lo hacemos porque vosotros sí estáis resentidos y ya sabemos -sobran testimonios aquí- de la violencia con la que sois capaces de vengaros. Dicho esto, te animo a que si eres tan valiente como fanfarroneas, nos des tus dos apellidos y no solo uno, cobarde, porque en google me aparecen como trescientas Miriam Posadas. Lo digo para que todos comprobemos si, como dices, no has tenido ningún apoyo del Opus nunca.

 

En fin. Besos y abrazos para todos, y que el 2010 sea un año lleno de todavía más alegrías y sorpresas.

 

Claire Fischer