Gracia de Monaco :
Querida Antonieta:
Me ha conmovido tanto tu relato (28/4/04) y he revivido muchas cosas personales. ¿Cómo no entender tu tristeza al dejar tu familia, la posibilidad de un estudio superior y otras muchas cosas?
Antonieta: muchos hemos tenido que volver a aprender lo que es tener amigos de veras, de esos a los que uno quiere a pesar de lo que sea. Y se puede; se puede todo. Tal vez nos ha llevado un poquito más de tiempo porque tuvimos que empezar cuando los otros ya estaban "de vuelta".
Aprendimos nuevamente a decidir, a decir que no, a armar nuestros propios programas, a organizarnos un viaje e irnos de vacaciones (pero vacaciones de veras, de esas en la que uno hace lo que le viene en ganas). Para que voy a seguir si tú lo sabes muy bien: lo has experimentado en carne propia.
Cuentas con más amigos de los que te imaginas, sólo que no lo sabes. Aquí estamos: apoyándonos mutuamente, comprendiéndonos y cuándo podemos, porque las distancias nos lo permiten, nos encontramos, conversamos y comemos juntos. En Sudacia nos hemos encontrado y nos seguiremos encontrando cada vez que podamos. Y si estás por Sudacia, ya nos conectaremos para que puedas comprobar que lo que digo no es una expresión de deseo, sino una realidad.
Todo mi cariño
Gracia de Mónaco
Publicado el Friday, 30 April 2004
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