En relación a la pregunta de Beto,

Coincidí con Father Cormac durante mi primer año en el Centro de Estudios de Barcelona, Monterols, que aquel curso 1972-1973,  por obras en el viejo edificio de Barcelona, se alojaba en el centro de numerarios del colegio Viaró (en Sant Cugat, cerca de Barcelona).

Eramos unos sesenta numerarios (qué tiempos aquellos, pensarán los actuales directores, viendo los cuatro gatos que tienen ahora). Uno de los curas que nos atendía era el primer japonés D. Soichiro Nitta, que siempre causaba sensación. Otro cura que echaba una mano de vez en cuando era Father Cormac Burke, que vivía en la zona de invitados de esa Residencia aunque muchas veces se venía con el centro de estudios. Se dedicaba a dar algunas clases de religión en el colegio y a atender al centro de numerarias auxiliares. Enseguida nos pudimos dar cuenta de la situación extraña de Father Cormac. Era un histórico de la Obra: el primer irlandés que pitó y el primero que se ordenó... No era un cualquiera. Saltaba a la vista que era una persona valiosa, inteligente, fina, con lo mejor de la ironía británica (que no inglesa), amplia cultura... Muchos nos preguntábamos qué pintaba allí encerrado. Yo lo hice  y se me dijo que estaba reponiéndose de alguna enfermedad, que había estado muy agotado de tanto trabajar y que el Padre quería que descansara, por lo cual apenas tenía relación con nosotros. La prueba "palpable" de su enfermedad es que a media mañana siempre tomaba un gran vaso de leche y un plátano....

Solamente alguna vez tuvimos tertulia con él, aunque otras veces asistía a nuestras tertulias, pero como uno más.

Al siguiente curso, el centro de estudios volvió a su sede en Barcelona y poco más supe de Father Cormac, aunque de las pocas veces que pude hablar con él conservo un recuerdo cariñoso.

Con el paso del tiempo, mi salida de la Obra en el 89 (voy a cumplir 20 gozosos años de libertad y felicidad) y lo que he leído en Opuslibros llego a la conclusión de que el bueno de Father Cormac era uno de esos "aparcados" famosos.

P.D. Por lo que he contado aquí, será fácil que alguno de los que vivieron conmigo esos años identifique la situación y hasta me identifique a mí (mi pseudonimo "pez" es revelador). Contactaría con ellos encantado.

pez