Lydia :
Para besitos estamos Marta, cooperadora que dices ser. Perdona pero si eso es así tú no has vivido en un centro y yo sí durante casi veinte años y hablo de lo que me ha pasado, doy testimonio de mi vida, una vida de la que como cooperadora no tienes ni remota idea.
Sorprende la coincidencia de lo que viví con la de gente que no conozco de nada porque vive en Argentina, Méjico o Italia. Hemos vivido exactamente lo mismo, en opuslibros.com se está produciendo una "comunión" impresionante que creo difícilmente se va a destruir.
Carlos Javier Alonso, que se entere el opus bien enterado de que las obras de Dios son indestructibles. Ellos no lo son y lo saben de sobra. Ellos se han dedicado a profanar esa palabra "obra de Dios", de ninguna manera se le puede aplicar al opus las palabras de Gamaliel. El opus no ha sufrido las persecuciones de los apóstoles, no son mártires de nada y no les interesa el evangelio más que como instrumento para tener más gente. Como católica afectada, denuncio esa utilización fraudulenta de lo más santo.
Más bien es el opus el que debería de ir preparándose para la que se le viene encima, pues no se puede extorsionar a tantos seres humanos y creerse que se va a permanecer eternamente en la cresta de la ola. Las olas de este mundo acaban por morir en una playa. Torres más altas han caído.
Un saludo,
Lydia
Publicado el Friday, 23 April 2004
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