Hola a todos. Ahora que supongo estáis descansados, porque hace más de un mes que no doy la lata aquí y como continuación de lo que ayer me contaba Saturio sobre la comida (a la que sentí muchísimo no ir y no era mi intención faltar), respecto a que era muy pesada y todo el mundo sabía ya que Enrique Rojas, no era “Catedrático de la Universidad Complutense” (aunque discrepo, no me voy por ahí, para no extenderme), quiero aclarar, que no sólo ha sido mi intención poner de manifiesto día tras día, que el susodicho Enrique Rojas, no era “Catedrático de la U. Complutense”, sino:

1º) Denunciar y que quedase constancia documentada en internet, ante el mundo entero, que pese a las denuncias (oficiales y públicas), se le ha permitido y permite, en este supuesto Estado de Derecho, a través de los años y de los tiempos (llevamos ya 25 años, que es lo mismo que ¼  de siglo)...

2º) La “Fuerza Opus”, “colaboradores” y/o “simpatizantes”, en nuestro Estado de Derecho, señalando el único punto concreto que conozco (como sabéis nunca he pertenecido al Opus y de momento, no sé mucho más):

- Audiencia y presentadores

- Con la ministra Castillo

- Con la ministra Pastor

- Con Ana Botella

- Con Mayor Oreja

- Con nombre y apellidos – y no, en un contexto de generalizaciones –, dando la cara, al poner mi nombre y apellido – con  DNI, datos suficientes para localizarme y un mail responsabilizándome de las afirmaciones que hiciese, que envié a Agustina, antes de que empezase a publicar sobre este asunto.

3º) Modestia aparte, creo que el hecho de poner de manifiesto los “chanchullos” que se dan – en torno a miembros del Opus Dei -, al desnudo, sin generalizar, diluir y/o esconder “a un pájaro Opus” – como si no tuviese nombre -, siendo una ciudadana de a pie irrelevante – como soy yo -, creo que es bastante original. Se pueden contar con los dedos de una mano, a las personas que aquí lo hacen.

Envío hoy otra prueba (para no variar y cruzo los dedos, para que se publique) que demuestra las molestias que se toman los “tramposos-chanchulleros”, para salvar, en mi opinión, a un criminal, a costa de la vida de una ciudadana de a pie (quizás muchos piensen, que el “machaque” de mi vida, no tiene mayor importancia, qué graciosos!!, porque no es la suya!, no pienso lo mismo).

Explico los documentos, intentando ser breve: 

Descubro en 2004 el archivo que envío como “Estética” – que imprimo, claro! - (Congreso celebrado en 2003, donde Ana Pastor – ministra de Sanidad del momento - , inaugura a las 16h. y a las 16,15h. actúa Enrique Rojas, como “Catedrático … de lo que ya sabemos, ni es, ni fue”), que había seguido colgado en la red, todos estos años.

Envié este doc. a Ana Pastor y en la documentación previa, relacionada con El Pucherazo en abril 08 al Colegio de Médicos de Madrid y más o menos preguntaba, si Ana Pastor y Enrique Rojas, habían llegado o se habían ido juntos, en el mismo taxi.

- A Ana Pastor también le pregunté (al Colegio, no recuerdo, tendría que mirarlo), si había tenido algo que ver, con el vergonzoso archivo del exp. disciplinario 1/99, que se abrió en el Colegio de Médicos (no me ha contestado todavía, aunque en el PP su secretaria R. Trillo, me dijo en inicio, que Ana Pastor me contestaría porque contestaba a todo el mundo, por eso me molesté en escribirle).

- No sé si empezar a pensar, que a Ana Pastor le caigo un poco mal, porque también le dije que, cómo siendo ella médico de profesión, presentaba a Enrique Rojas un libro, donde “el citado” Enrique, colocaba una cátedra de Psiquiatría en una Fac. de Psicología. Que a ver si iba a tener que ser yo – que no había sido nunca ministra de Sanidad – quien tuviese que enseñarle, que las cátedras de Psiquiatría, siembre estaban ubicadas en las facultades de Medicina, ya que era una especialidad médica.

Pues bueno … después descubrí que a este programa, le han dado un “Cambiazo” y Enrique Rojas ha desaparecido del ladito de Ana Pastor y ha ido a parar a otro día del Congreso (podéis verlo aquí, hasta que lo quiten o vuelvan a recolocarlo),

No estoy denunciando ahora, el asunto de la “no cátedra”, no os confundáis de nuevo, por favor. Estoy diciendo y probando, que eso está muy feo, que hacen trampas y además, archivan mi denuncia con El Pucherazo.

Esta nimiedad – con relación al resto de “chanchullos”, que he soportado y soporto -, es sólo una nimiedad, fácil de subir a internet y de entender, sin excesivo texto, a muchos les parecerá pesadez (creo que estos, son, los que no tienen interés en que se destape a Enrique Rojas), a los que me parece que me quieren un poquito, les parece insensatez, a mí me parece valentía (y aunque os pueda parecer que estoy loca, por decir lo que digo, sigo manteniendo que ni estoy ni estuve loca y Enrique Rojas intentó internarme en un psiquiátrico privado bajo su control, en 4 ocasiones, guiado por intereses ajenos a la ciencia y ética médica, que se resumen en ideología y dinero).

Esta pesadez – os parezca bien o no -, es la lucha desgarrada y atroz, de una ciudadana de a pie, que no está dispuesta (y pretende abrir camino) a someterse y callar, mientras se pisotean sus derechos por salvar a un supernumerario del Opus Dei, que ha destrozado vidas y medicado a personas con fines – insisto -, ajenos a la ciencia y a la ética, como más o menos le dicen aquí, otros médicos (pag. 2 puntos 6 y 7 / otro día si se me permite, explicaré mejor este documento, que considero de interés social),

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¿Qué queréis que os diga, para que soportéis mejor mi pesadez?. No se me ocurre nada. No tengo nada más que decir. Porque si se consigue que a este individuo lo quiten “de médico” para que no pueda volver a ejercer el tipo de terrorismo que ejerce o hemos conseguido ya, que le hayan retirado de los “tratamientos” a los miembros de la Obra, para “perseverar” como decía Angeles Sanz, valen la pena todas las molestias.

¿No decís que entre vosotros sois hermanos? ¿qué pertenecíais a la misma familia? En qué quedamos?. Porque a mí – que no he sido nunca del clan -, sí me indigna que “ … traten a los miembros de la Obra ( o de cualquier otra secta), para perseverar” y paso de las molestias.

Si no os he convencido, os ruego perdonéis de nuevo las molestias y por favor, abrid esto www.slideshare.net/gueste425f0/consentido-presentation

(a ver si se coloca, junto a la web de Enrique Rojas, para que lo vean bien quienes buscan información, para acudir a su consulta).

Besos a todos,

Isabel caballero (Madrid – España)