Hola Orejas,

al hilo de lo que cuenta Pedro de la Blanca, conocí a don Amador en septiembre de 2001. Nos impartió la asignatura de historia de la iglesia antigua y medieval a un grupo de numerarias jóvenes en el colegio mayor Alsajara. Yo no lo veo tan elegante como dices, un cura más que participa de la hipocresía institucional, no hay otro remedio.

En aquella época había empezado la cuenta atrás hacia mi salida, aunque yo no era todavía consciente. Ya notaba de parte de las directoras y de todo el mundo en general el vacío que te hacen cuando te quiere mostrar que no estás haciendo lo que ellas quieren.

Es una sensación extraña, de pronto notas que no cuentas nada. Nunca tuve importancia en el opus, se burlaron bastante de mí porque me había tragado sus mentiras durante toda mi vida. Pero en esta etapa final noté especialmente que hacían como si no existiera.

Y don Amador participaba también de ese juego inmundo del desprecio.  Concretamente en la clase conté que ese verano desde el curso anual de la Casería habíamos hecho una excursión a un baptisterio paleocristiano que hay en Gabia la Grande, al lado de Granada. Dado que la asignatura era historia de la iglesia antigua me pareció apropiado que la gente lo supiera e incluso que alguien se animara a visitarlo. Este cura me miró con cara de póker, como si hubiera dicho algo que no tenía nada que ver.

Fue una de las anécdotas que a la vez que dolía, me hizo comprender que en el opus lo único que cuenta es tu relación con el poder. Quitando eso, arte, cultura, historia, deporte, cualquier cosa interesante, que te enseña y te hace persona, no viene a cuento.

Y sobre Calvi, dice Moncada que no se ha demostrado que el opus tenga que ver con ningún asesinato.

Si se lee con detenimiento la historia del Banco Ambrosiano y el IOR en 1982, si a alguien estorbaba la existencia de Roberto Calvi era al opus dei. Calvi fue atraído con engaño a Londres, le prometían que le ayudarían a sacar a flote su banco con dinero procedente del opus, pero curiosamente en Londres Calvi encontró la muerte.

En un primer momento el juicio que siguió determinó que la causa de la muerte era indeterminada.

En 2002 se reabrió el caso y ya se dijo que había sido homicidio y que los autores del asesinato quisieron que pareciera suicidio.

¿No es cuando menos curioso que en ninguno de los dos juicios se haya "Podido" o "querido" llegar al fondo del asunto? ¿cómo podemos tragar que aparece un cadáver en el centro de Londres de un importante banquero y no se pueda averiguar el autor del crimen? Hay más casos de muertes alrededor del opus sin esclarecer, en Italia, en Francia en los años sesenta, un supernumerario y un político que había recibido dinero al parecer de Rumasa para su partido.

Y siguiendo con las muertes, aquí se han relatado ya varios casos de suicidios inducidos por las prácticas persecutorias y sectarias que llevan a la gente a la desesperación.

Ana Azanza