Este verano he pasado unos días en madrid. Después de bastantes años he vuelto a entrar en la catedral. Quise hacer una visita tranquila.

En mi recorrido hubo un momento en que tropecé con escrivá de balaguer.  Sabía que había una imagen suya, pere me llevé una gran sorpresa al comprobar que en uno de los lados de la capilla representaban a monseñor, arrodillado al lado de una cama en la que yacía un enfermo.

Mi primera impresión fue de incredulidad. Cierto que desvié la vista rápidamente. Cierto que no leí nada de lo que allí habían escrito. Cierto que nadie se paraba a leer.

¿Qué quiso, qué quiere, qué pretendió, qué pretende el opus dei? ¿Es ésta escena representativa de la  misión del opus dei en el mundo? ¿Qué pretendían, qué pretenden? ¿Engañar, confundir, impresionar?

Ahora, mientras escribo estas líneas, pienso - irónicamente -, que tal vez se tratara de una de las "visiones de futuro" del fundador. Hoy hay mucho enfermo al que cuidar, desgraciadamente, dentro de la obra, pero claro, ésto es la consecuencia de un modo de "vida", no  es una labor social desinteresada.

Mi primera impresión al ver aquella escena fue: "una mentira más".

Después de seis años y medio fuera de la obra, miro atrás y recuerdo momentos, escenas concretas y me parece algo surrealista, no se me ocurre otra palabra para defininir lo que pienso.

¿Qúe era aquello? ¿un teatro? ¿un circo? ¿una comedia?¡Qué gran pérdida de tiempo, de enrgías, de inteligencia, de sentimientos! ¡Qué gran pérdida de vidas!

Hasta hace un par de años, quedaba con una persona de la obra para tomar una cerveza o un café. Solía ser por mi santo. Ya no lo hago. Me parece absurdo. Ella en "su mundo" y yo en el mundo. ¿Le iba a preguntar por "la labor", si no creo en ella, ni por supuesto me interesa?

Cuando  me cruzo por la calle con gente de la obra me da pena. Me siento algo así como con complejo de superioridad. Me entran ganas de preguntarles ¿No te das cuenta de que todo es mentira?¿No te das cuenta de que "amar" es algo más fácil?

Miro atrás y me da mucha pena. Tanto papel, tanto horario, tantas prisas ¿para qué?

Esto es algo que veo desde la lejanía. Gente que forma parte de una comedia, una comedia con muy poca gracia, algo irreal, algo que no existe, aunque esté, porque no es, y si es, es mentira.

A la vez siento un profundo respeto por la gente que cree en la obra de verdad, por los que están de buena fe. Y siento una produndísima repulsa por los que están "de otro modo" y que además se aprovechan de ellos.

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