Agustina.
Sé que todos pasamos por momentos de flaqueza, desilusión, desánimo; es humano. Lo digo por tu comentario al correo de Pericoperro del 22 de septiembre y los que le siguieron. Tal vez te pasa lo que a los confesores, que oyen tanto de la miseria humana que se pueden entristecer. Tu oyes mucho sufrimiento de bastantes afectados y también recibes críticas de los ejecutores de esa "cosa" por lo que posiblemente te llegues a cansar o desanimar.
No sé si pienses que entre la visión, misión, valores (palabras ahora tan de moda) de Opuslibros (OL) esté el que se enfrente pública y abiertamente, dando la cara, al Opus. Yo sí puedo decirte que a mí me ha sido súmamente útil; también para muchas personas que me lo han comentado personalmente: leer Opuslibros es como una "web terapia", para los que la han dejado, pero también para los de dentro que esperan con impaciencia cada actualización.
Es tan difícil poder defenderse del Opus que ni el mismo Opus puede defenderse de sí mismo. Me explico: Hay uno que fue un numerario de bandera, de esas familias donde seis hermanos pitaron, ahora sólo queda una numeraria y otra supernumeraria. Pues al que me refiero trabajó toda su vida de numerario en la Universidad Panamericana (UP) haciendo todo tipo de cosas, por la buena y por la mala.
Un supernumerario, fundador de Grupo Collado y el mayor benefactor de la UP, que murió en 1999, se hizo muy cercano, por el trato en la Universidad, de ese numerario. La empresa en cuestión tiene en México cinco plantas de fundición (www.gcollado.com.mx). Ese buen hombre heredó la inmensa mayoría de su gran fortuna al Opus, a sus hijas les dejó lo necesario pero casi todo se lo da al Opus por medio de éste numerario. Eso fue así porque la UP y todo el Opus tiene asociaciones sin fines de lucro, por lo que no pueden poseer o comprar acciones.
Pues ese numerario cuando dejó la prelatura después de estar 35 años dentro, se llevó las acciones que no regresó al Opus, la Prelatura no pudo defenderse y sólo vio perder el donativo más grande que le habían hecho en la historia de la Prelatura en México. ¿Qué se dice dentro del Opus al respecto?: nada. No pasó nada. Pero la realidad es que hay gran revuelo por éste hecho que se comenta "bajo el agua" entre sus miembros. El ex numerario tranquilamente dice que la UP le entrega aproximadamente dieciséis mil dólares al mes en agradecimiento a lo hecho por ella.
Supe de otro que insistía a la delegación que el centro del cuál era director necesitaba un automóvil para la "eficacia" de la labor; al poco tiempo de que autorizaron la compra del auto y de su adquisición, ese director se fue junto con el automóvil nuevo y ni quién le pudiera decir algo pues el coche estaba a su nombre.
Y son cantidad los directores, subdirectores, secretarios, gentes que están en consejos locales, que aprovechando el dinero que pasa por sus manos, y que proviene del trabajo de numerarios, aportaciones y donativos lo destinan a su uso personal e incluso para sus negocios personales. En la Residencia Universitaria Panamericana (RUP), hace muchos años, el secretario huyó con la caja de caudales y no hubo manera de demandarle, entre otras cosas, porque la Residencia no podía demostrar ante la autoridad el origen de los ingresos que recibía de los jóvenes residentes puesto que no los incluía en sus declaraciones de impuestos, además de manifestar que no tenía empleados dados de alta, esto es, los directores del consejo local.
Tal vez dentro del opus no servimos para nada, pero fuera de él creo que sí servimos a mucha gente, al menos escribiendo y compartiendo nuestras vivencias para que otros se sientan acompañados en lo que están viviendo, o que se prevengan de lo que les puede suceder. Yo deseo que muchas personas se vean comprendidos en su dolor, pues aún quedan varios dentro que tal vez no saldrán porque no tienen nada, pero nos tienen a nosotros, y al menos, por nuestras aportaciones en ésta web les servimos.
Lo digo al Chile
