Querida Ingenua:

Soy supernumeraria, te prometo que no voy a rezar por ti, pero porfavor continúa leyéndo este texto.

En tu último escrito, me he podido ver reflejada en muchas cosas. Te quiero decir que  concuerdo contigo en todo lo que has dicho. En el opus dei, por desgracia, el mandamiento del amor se vive pésimo. Las obras de misericórdia se practican siempre y cuando atraigan un beneficio para la prelatura, y en la mayoría de los casos, se nos "adiestra" para creer que el/la director/a es nuestra conciencia (algo así como el Pepe Grillo de Pinoccio), al pasar de los años, te acostumbras a que el director o directora en turno te digan qué decir, qué pensar, cómo actuar, etc., entonces tu inteligencia y tu corazón ya no actúan a voluntad propia, se convieten en títeres. Afortunadamente en muchos casos, "algo" mueve al corazón para seguir latiéndo y al cerebro para seguir pensándo, y te das cuenta de las imbecilidades que has cometido. Yo te digo, que así como los has dicho en tu escrito, con toda la sinceridad y buena fe del mundo, se lo digas a ésas personas de quien hablas, quizá, tu les das ese algo que necesitan para actuar como hijos de Dios y no como un@s desgraciados... 

No se si eres "de casa", pero imagino que vives rodeada de OPUSIN@S (¡me encanta la palabra!), la verdad es que no he leido todos tus escritos -lo voy a hacer al ratito-, tu formación seguramente ha sido completamente Opus Dei, y tu sientes que tu relación con Dios está estropeada. Desafortunadamente eso pasa en casi todos los casos, no sé por qué, en la obra te desgracian la conexión personal que tienes con Dios, esa que tienen todas las personas y que es diferente en cada quién.

En mi caso particular,llegó un momento en que estaba tan fanatizada que veía a todos los que no estaban dentro como si fueran la representación viva del mal y del pecado, todo lo juzgaba mal, todo para mi era la perdición, hasta que un bendito hombre, en una larga conversación, me abrió los ojos y me sacudió todas las telarañas de la cabeza. Este señor es nada menos que el sacerdote que me Bautizó y que me dió la Primera Comunión. Es muy amigo de mi familia, no es del Opus Dei, vivió muchos años ejerciéndo su ministerio en la India y cuado lo volví a ver, haz de cuenta que rompió de un golpe con el capelo que me cubría. Me habló de la Misericordia, del Amor, de la Caridad, y yo, en ese momento me liberé de un lastre enorme. Si, Ingenua, a Dios le importa mucho más una sola Obra de Misericordia que 40 Rosarios, 56 Visitas al Santísimo y 15 Misereres juntos. Tienes toda la razón en juzgar duramente a aquellos que te rodean que se dan baños de pureza con todos sus rezos y todos sus teatros, pero que no son capaces de dar una mano cuando los necesitas, que actúan con indiferencia ante el dolor de los demás por que "no es formativo", que te hacen creer que Dios es un ser elitista que sólo se preocupa por los elegidos (del Opus Dei), cuando en realidad Dios nos ama a TODOS, y quiere que TODOS nos amemos. Tu tienes que decirles de  frente, todo lo que te parece mal, esa es la corrección fraterna Evangélica.

En cuanto a cómo sacarte toda la mierda de dentro, te doy el mismo consejo que a mi me dieron. Espera que los chicos y el marido salgan de casa, agarra un crucufijo grande que tenga Cristo (las cruces de palo no valen), enciérrate en tu lugar preferido, abrázate del crucifijo con todas tus fuerzas y dile a El: te amo, te necesito, enséñame. Después lloras a lágrima viva por todos tus sufrimientos, desaciertos y miserias, e inmediatamente te sacas todos los pájaros de la cabeza y te dedicas a vivir de la manera más feliz que puedas con lo que tienes. Haces nuevos proyectos para tu vida, y me haces el favor de ignorar a todo aquel que te haga sentir mal. Tu piedad sólo les concierne a Dios y a ti, tú la tienes que vivir tal y como te dicte tu corazón y tu inteligencia ¡que para eso Dios te las ha dado!. Te advierto que no es fácil, pero cuando te decides a que no te vas a dejar influenciar por nadie, que quieres actuar como te dicte tu conciencia, la vida es más amable, pero el camino es un poco complicado. Cuesta mucho romper con los vicios.

Te mando un abrazo muy cariñoso, y sigo en lo dicho, no voy a rezar por ti, pero te voy a guardar en mi corazón, quizá no te sirva de consuelo, pero es bonito pensar que alguien te acompaña con el pesamiento y con el corazón. (¡Madre mía!, no puede ser que sea yo tan dramática, pero así me ha salido)

Salypimienta.

La Nota Para Zayas:

En primer lugar, te quiero decir que hubiese sido muy agradable que te presentases en tu escrito, no sabemos si eres miembro del Opus Dei, qué tipo de miembro, y ni siquiera nos informas si tienes contacto cercano con la Prelatura.

Te preguntas ¿que clase de gente son?, ¡hombre! ¿que no leíste algunos escritos?, con ellos te hubieses dado cuenta de lo que hay: seres humanos que comparten  un pedacito de su alma, de sus vivencias, de sus aciertos y desaciertos. Si esto no es suficiente, haz "click" en la columna de la izquierda de la página en donde dice Quienes Somos. Ahí se encuentran las fotos de nuestro queridos Orejas, que son para algunos de nosotros una mezcla de confesor, psiquiatra y amigo del alma.

Nos dices que deberíamos informarnos bién de lo que se trata el Opus Dei, ¡porfavor Zayas!, lee unos cuantos escritos de ésta página, estamos mejor informados que tú. Todos estamos, o hemos estados metidos en el Opus Dei hasta el cuello.

Por último, tú eres CATOLICO, (yo también), lo pones en mayúsculas, me ha llamado la atención. Tienes razón en decir que el Opus Dei es parte de la Iglesia católica, pero que quede bién claro, el Opus Dei NO ES la Iglesia Católica, entonces la verdad es que no entiéndo a que viene tanto aspaviento. Porfavor dedícale un largo rato, cuando tengas tiempo, a leer los escritos de opuslibros, estoy segura de que todas tus dudas se aclararán, y quien quita y hasta se vuelva uno de tus sitios favoritos. 

Saludos

SyP