Mi querida Silvana,

        Estos días he visto más en profundidad la web y no como en verano que la he visto de cuando en cuando y por encima.

        Aunque mi vivencia en la Obra era la de una estudiante universitaria, sé de sobra la sensación de dormirse llorando y despertarse llorando, y que la gente que vive contigo cada vez que te llaman a solas no es para dar un paseo y echar unas risas, sino para corregir mil tonterias de las que uno ni se entera porque dedica todas sus fuerzas a sobrevivir...

       En torno al debate de pedir o no la dispensa, que tantos escritos ha suscitado este verano, si me lo permites, te doy un consejo... haz aquello que te dé Paz .

       Unos te han animado a irte sin escribirla y otros te dicen que la escribas. Yo no voy a entrar a analizar los consejos de unos y de otros.

       Cuando uno se va del Opus Dei, como tantas otras decisiones en esta vida, debe hacer aquello que cree que es lo correcto. Y hacer lo que uno cree correcto, es lo que da Paz. Porque Dios es Dios de Paz.

       Te pongo un enlace con la canción del Nada te turbe de Sta. Teresa, que a mi en momentos duros me ha ayudado mucho. Y le pido al Señor que no se te olvide que "Todo se pasa. Quien a Dios tiene nada le falta. Sólo Dios basta".  

       Un abrazo fuerte y mucho ánimo.

       majonije