Hace algùn tiempo me he topado  en esta web, pero nunca me he atrevìdo escribir………quizà por la verguenza de un castellano bastante aproximativo: pido perdòn por faltas, errores u otras cosas causadas también–en parte me siento disculpada- por el teclado de las computadoras que faltan de unos signos que nosotros no usamos.

No quiero detenerme demasiado en mi historia: también yo estuve algunos años -ni pocos ni muchos – en la Obra como numeraria; ahora soy casada con dos hijos y, leyendo muchos de vuestros escritos, tengo que  considerarme muy afortunada. No sufrì ninguna persecuciòn, no recibì alguna maledicciòn (tampoco la del rejalgar quizà porque no logro traducirla correctamente en mi idioma).

Ayer me topè en un escrito de Jacinto (2005) que intenta explicar como es posible permanecer muchos años en la Obra antes de irse ; en particular me chocaron unas lineas que no acabo de entender y que me impulsaron a escribir pidiendo, si el autor puede, unas explicaciones :

“Cuando llegué a la obra aprendí que el papa (Pablo VI) era malo, y que la obra y su fundador eran buenos y salvarían a la Iglesia…….”

“..me fui programando por dentro para prestar a Juan Pablo II la misma adhesión que había prestado al fundador de la obra y que ya había muerto….

….Cuando le escuche el discurso del 2 de octubre de 1979 en la ONU en New York, le leí el discurso a los científicos alemanes en la catedral de Colonia, y leí la 'Familiaris Consortio', entendí que decía las mismas cosas que Pablo VI, y entonces es cuando se produjo la escisión »

“Si yo hubiera sido ingeniero a lo mejor no habría leído ninguno de esos textos de Juan Pablo II, habría aprendido lo que me hubieran comentado en las charlas internas, y no me habría escindido nunca. O si yo hubiera sido italiano, habría sabido desde siempre que lo normal es que cada papa tenga una diferente concepción política de la Iglesia, que cada grupo tiene que esperar que manden los suyos, y tampoco me habría escindido.”

Porque mi experiencia ha sido muy distinta; cuando conocì a la Obra el Santo Padre era Pablo VI y, de verdad, no me acuerdo ni una frase ni un comentario en contra de El y de Sus ensenanzas; mas bien aprendì a querer y rezar màs por el Papa, especialmente en los ultimos dias de Su enfermedad; por supuesto rezé mucho por Su Sucesor y vivì la meteora de Juan Pablo, I cuyo artìculo sobre la Obra atrajo mucho las simpatias, - aunque  mi cariño a El tenìa tambien otro fundamento màs personal.

Por supuesto vivì muy de cerca la elecciòn y el pontificado de Juan Pablo II, cuyos escritos – por supuesto tambièn la “Familiaris Consortio” leì mas de una vez y no solo oì comentar en charlas, lecciones y variados medios de formacciòn.

Tampoco yo soy ingeniero, aunque quizà mis estudios estén màs cerca a ingenieria que los de Jacinto, pero de verdad no he sufrido ninguna escisiòn entra la doctrina de la Obra y la de la Iglesia; aun màs, sòlo leyendo esta web y otras parecidas, me he enterado por primera vez de supuestas fricciones entre la Iglesia y la Obra.

No sé si he expresado claramente mis dudas y preguntas; pidiendo perdòn a todos por las faltas y errores, me gustarìa mucho si alguien quisiera aclararme algo.

Saludos a todos