El miércoles pasado apareció en la web un escrito de Angie que me recordó lo agradecida que le debería estar al opus por meterse en todo, también en mis años universitarios. 

Cuando estaba en COU tenía claro lo que quería estudiar en la Universidad pero antes de acabar el curso y hacer la preinscripción correspondiente me dijeron en mi centro que la de estudios de la delegación quería hablar conmigo. Quedé con ella y me dijo que las directoras pensaban que no veían conveniente que estudiara la carrera que yo había decidido, pensaba hasta entonces que uno era libre en el opus para decidir en esos temas pero descubrí que no, todo debe pasar por el aro de las directoras y contar con su visto bueno. En fin que después de esa charlita me dijo lo que debería estudiar por ser más conveniente para la obra. Obedecí.

Empecé la carrera y cuando estaba en tercero a mitad de curso me dicen en el opus que debo dejar el curso, esta historia ya la conté en otro escrito, por lo que no me voy a repetir. El caso es que esa decisión conllevaba el perder la beca con la que estaba estudiando pero eso no pareció importarles, desde luego no era el opus el que me costeaba los estudios, obedecí como estaba mandado y no quiero ni acordarme de las explicaciones que tuve que inventarme para explicar en mi casa semejante decisión, no había explicación racional. Por esto también le estoy tremendamente agradecida al opus. Porque la que tuvo que vérselas para conseguir el dinero de la matrícula al curso siguiente fui yo y vergüenza me daba decirle nada a mi madre que se desvivía porque sus hijas terminaran sus estudios con una situación económica muy difícil.

A los del opus y sus defensores les parece que gracias a que fuimos del opus éramos buenas personas y en el caso de Angie buenos estudiantes. En fin, lo de ser más o menos responsables con los estudios es cosa de cada uno. En mi clase la mayoría eran gente estudiosa y que yo sepa nadie era del opus, lo normal era terminar la carrera en los cinco años  y si acaso que quedara alguna pendiente pero eso de carreras interminables no sé a que se refiere, desde luego mi experiencia en la Universidad es que la gente en general no estaba para pasar el rato, estudiaba y hacía las prárcticas de la mejor manera. Bueno, está claro que yo siendo agregada sí tardé más de cinco años en terminar la carrera ya que al perder ese año que estaba haciendo tercero al curso siguiente me tuve que volver a matricular en tercero, no es que hubiera suspendido es que no me pude ni presentar a los exámenes por la brillante idea que tuvieron las directoras con respecto a mis estudios, si todavía les tengo que estar agradecida por lo acertadas que estuvieron las directoras organizando lo que no les incumbía, si es que se pasaron de listillas pero se pasaron en nombre de la voluntad de Dios ya que la voluntad de Dios venía a través de las directoras. Ahora lo pienso y no me explico como pude tragar.   

Por eso pensándolo bien no tengo nada que agradecer al opus sino mas bien al contrario ya que el opus me organizó mis estudios universitarios como mejor le convino y se metíó donde no debía ya que según me dijeron al principio su labor era netamente espiritual y como bien sabemos el opus controla toda la existencia de sus fieles y si alguna vez no controla no es por falta de ganas sino porque no le dejan.

Saludos, Mabel.