Quería contarle a Morgana dos ideas que me han venido a la cabeza al leer su último escrito.

Moragana, leyendo tu escrito último siento casi físicamente la soberbia del Opus Dei: vuestra soberbia como individuos y vuestra soberbia como institución. Esta idea es la que he querido trasmitir a D. Javier Echevarría por medio de uno de sus Vicarios. Es ese sentimiento de que estáis por encima del resto de la humanidad; y cuando se os lleva la contraria, nos lanzáis a la cara las cifras... tantos miembros del Opus... Y yo digo, con un razonamiento muy del Fundador, ¿cuántos había el día que el Fundador "vio" el Opus Dei?... ese día nadie, sólo él,  y sin embargo ahora sois muchos. Ya sé, y me adelanto a tu razonamiento "era él solo y mira ahora, así que es obra de Dios". A eso podría contestarte que muchas organizaciones del mal están formadas por mucha gente; eso no es prueba.

Me contaba una amiga que fue del opus y que ahora no lo es, una anecadota muy buena. Vaya, es tan buena que es de tertulia... Me decía que hace varios domingos fue a misa (porque ella se fue del opus y va a misa...) y el evangelio de ese domingo era la parábola del fariseo, que en el templo decía: "Te doy gracias, Dios mío, porque  no soy como éstos...", "éstos" eran lo que él consideraba "gentuza", o sea, como nos consideráis muchos a los de opuslibros, digo yo. El caso es que, me decía mi amiga, que había recordado a varias personas del opus que ella conocía aunque, pensaba, seguro que ella misma no tendría por qué juzgar a esas personas. El caso es que, seguía diciéndome, que esa misma tarde la llamó una hermana y le dijo "en el evangelio de hoy he recordado a "fulanita" (fulanita es del opus)".

La cosa no termina ahí. Mi amiga, la llamaremos Miss X, el lunes llegó como todos los lunes a su trabajo. En un momento de descanso se tomó un café con una compañera que le comentó: "¿fuiste a misa ayer?, es que cuando leyeron el evangelio me acordé de mi hermana, la del opus..."

Ni que decir que Miss X soy yo misma.

Saludos

Inés