Quería preguntar como va vuestro asunto de la denuncia en Magistratura por la falta de cotización a la Seguridad Social y recordaros que los licenciados en España, cotizan en el grupo 1 – actualmente más o menos 3.000E x 14 pagas -. Dejaros de rejalgar – que no es seguro - y poned en Magistratura vuestras fuerzas, que seguro que con pensión “el rejalgar”, se lleva muchísimo mejor!

            Aunque no entiendo de casi nada – ni siquiera sé si mi concepto de lo que es una prelatura es correcto -, voy a opinar - porque me siento como en casa - sobre la investigación. Estoy más de acuerdo con Casperbanana que con la nota que escribió Agustina a continuación. Cuando las cosas están muy liadas, quien investiga entiende muchas cosas mal y otras no las entiende -. Si piden explicaciones o dejan que las aclare alguien, serán súbditos del opus quienes lo hagan – no vosotros -.

            Pese que el vaticano no pueda seguir mirando hacia otro lado como dice Agustina, la historia puede concluir con una amonestación privada – que es lo mismo que nada – , con un “no se han encontrado irregularidades” o, “no existen irregularidades relevantes”. Nunca llegarán al fondo. Es imposible para un ajeno y al vaticano – lo mismo que a cualquier grupo, partido, empresa…, no le interesa que haya jaleo dentro – sin añadir los argumentos de Casperbanana -.

            Creo que debéis haceros oír. Se me ocurre poner en la web un sitio para firmar, pedir firmas que apoyen que recojan vuestros testimonios y con el apoyo recabado, pedir que os oigan.

             No serán sólo los rencorosos que se han ido del opus, quienes piden que se les oiga. Si se negaran a oíros, estarían negándolo también a una parte de la sociedad y si la resolución resultara nula o light, la investigación siempre estaría mal cerrada y pidiendo a gritos otra. Pero si os parece demasiado fuerte recoger firmas, pedid sin firmas que os escuchen. No esperéis a que sea de motu propio. Tenéis muchas posibilidades de quedaros sin hablar, incluso pidiéndolo.

Besos, Isabel C.