Mis queridos/as todos/as,

no sabría por donde empezar a enumeraros los ratos de compañía que me habeis dado durante este trágico 2007, trágico por la muerte de Antonio Petit a quien tanto queríamos en casa!!!!. Deciros que para mí la Navidad es sinónimo de tristeza, nada será como antes desde hace ya unos años... es cuestión de ver el lado positivo ya lo sé, pero la falta de los seres queridos supera en mucho el poder disfrutar de unos días que son de reuniones con la familia. Empezando por mi hijo cuya primera familia es el Opus Dei y siguiendo por mi hija que si desde el cielo o desde la Santa Sede no lo remedian ésta será la última Navidad que pase en casa. Quedaremos el peque y yo, será la voluntad de Dios o lo que vosotros querais, sé que no me he de quedar en el goce de esta vida, pero de momeno es la que tengo y nadie me ha ensañado a vivirla de otro modo más que de vivirla siendo feliz, y de eso me atrevo a quejarme, que de nada más, Dios me perdone por tanta ingratitud porque no nos falta nada, sólo el amor y la compañia de los que más queremos... ahí es ná!!!.

Perdonad mi discurso triste, odio la Navidad POR LO QUE SIGNIFICA DE CONSUMISMO Y POR LA FALTA DE CARIDAD. NOS ESTÁN ESTAFANDO!!!!!!!!.

A todos y a todas mis mejores deseos para que 2008 tenga algo de bondad para los que tanto habeís sufrido.

Os quiero mucho, millones de besos y un abrazo enorme,

Marietta