El Sábado 2 de Junio tuvimos el "II Encuentro en Murcia" de Ex-miembros de ambas secciones.

Nos reunimos un buen grupo de ex-numerarias y ex-numerarios de las provincias de Murcia, Alicante, Valencia y Álava. Al igual que en el  "I Encuentro en Murcia" vinieron familias completas con sus hijos, bebés de pocos meses, ex-aspirantes muy jóvenes, ex-profesores de la Universidad de Navarra, sacerdotes diocesanos que habían sido curas numerarios, esposas de ex-numerarios embarazadas, ex-numerarios/as hijos/as de ex-numerarios/as casados/as con ex-numerarios/as, etc., buen reflejo de ese circo que desde hace ya tiempo es el opus. Lo que ocurre es que nosotros no estamos para payasadas.

Una vez más reconozco con alegría lo guapas que son las ex, tanto ex-numerarias como ex-numerarias auxiliares, que con su presencia, gracia, ocurrencias al hablar y habilidad en la cocina, hicieron de aquel encuentro una jornada inolvidable. Chicos, los que hicisteis las paellas también disteis la talla.

Sirvan también estas líneas de agradecimiento a la ex-numeraria y su marido (ambos auténticos ángeles en la tierra) que ofrecieron su casa para la realización de este encuentro.

Después de comer iniciamos una tertulia informal en la que se alternaban comentarios sobre temas profundos (la secta, re-escribir la historia, la institucionalización de la mentira, la captación de adolescentes, la anulación de la mente, el escrito al Vaticano, la carta a Monteresi, el opus y Juan Pablo II, el opus y Benedicto XVI, etc.) , con anécdotas e historias de todo tipo. Hay que tener en cuenta que algunos nos conocíamos desde hacía mucho tiempo y otros nos acabábamos de conocer.

Zaida, ex-numeraria auxiliar, contaba como el primer día que entró a hacer la limpieza en la residencia se encontró una habitación con la puerta cerrada y una silla delante. Quitó la silla, abrió la puerta -la habitación estaba a oscuras- y levantó la persiana. Al hacerse la luz en la habitación observó que el residente se tapaba la cabeza con la sábana. Se dió media vuelta y salió zumbando. Lo gracioso de este sucedido no es el hecho en sí, sino el comentario que al escucharlo en la tertulia hizo Zoraida, ex-numeraria: haberte metido en la cama con él. Ni que decir tiene que las carcajadas duraron un rato. Lo mismo que cuando contaron lo de aquella subdirectora de cl que tenía novio y éste la acompañaba hasta la mismísima puerta del centro, la manía de una administradora de tener contados los bizcochos, magdalenas, etc., de la despensa, los trucos para usar la almohada como "colchoncillo" y hacer más llevadero lo de dormir sobre la tabla, y así, un sin fin de recuerdos, que hicieron de la tarde del Sábado un momento delicioso.

Este encuentro ha permitido que los que en tiempos estuvimos separados por un muro con doble puerta, nos hayamos conocido, ya que, efectivamente, a esta comida hemos asistido ex-residentes de Albalat (Valencia) y ex-numerarias que, en los mismos años que nosotros hicimos el centro de estudios, ellas estaban en la administración. Muchas gracias por vuestros cuidados de entonces. También muchas gracias a la numeraria auxiliar gallega, estupenda cocinera de Albalat (al final no me quedó claro si sigue dentro o no) por su trabajo en aquéllos años 80.  

Caía ya la tarde y empezó a hacer frío. Trasladamos entonces la tertulia desde el jardín al interior de la casa. Imaginad, la sala de estar, unos en los sofás, otros en las sillas. Yo paseaba la mirada por aquéllos rostros radiantes recordando, a su vez, situaciones similares en los distintos centros en los que viví. Similares, pero sin mujeres (evidentemente). Para mí fue una antesala del cielo. Un montón de ex-numerarios y ex-numerarias de tertulia. Igual que cuando estábamos "en casa". Ahora todos juntos, como Dios manda.

Termino ya. Para mí fue una experiencia muy enriquecedora. Ahora sé de que color son los ojos de quien escribe con este o aquel nick, cual es su tono de voz, como gesticula, como sonríe, como se exalta. Y lo voy a decir también. No he exagerado lo más mínimo el ambiente que hubo. Lo he hecho en recuerdo del magnífico día que vivimos y para que los del opus que leéis esta web (sí, sí, tú, director o directora) sepáis lo bien que vivimos fuera y lo felices que somos. Las cosas claras, desenmascaremos al Opus Dei, como dijo Emevé.

Un cordial saludo a todos y a todas
Marco Polo