BRUAIRE, Claude Logique et religion chrétienne dans la philosophie de Hegel Du Seuil, París 1964, 185 pp.
1. Ensayo sobre el significado religioso de la filosofía de Hegel en el que el autor se propone exponer la íntima relación que, en su opinión, existe entre el pensamiento del filósofo alemán —especialmente en la obra "La Ciencia de la Lógica"— y la religión cristiana. El estudio está realizado con rigor y profundidad, y es considerado como una de las principales obras actuales sobre esta materia.
2. En la interpretación de Bruaire, Hegel sostendría que la religión cristiana, como las demás, ofrecería sólo una representación particular y aleatoria de la divinidad oculta, si no fuera —de verdad— la religión revelada; si en ella el Absoluto "se revela", es preciso reconocer que es la "religión absoluta", la manifestación de Dios a plena luz. Tal es, según Hegel, la esencia del cristianismo (cfr. p. 13). Sin embargo, la teología cristiana, diría Hegel, ha sido incapaz de expresar esta revelación. No se ha conseguido un saber —ni teológico ni filosófico— conforme con la fe. El estudio de Bruaire quiere demostrar que Hegel, con su filosofía, no hace más que intentar esta tarea de exponer la manifestación del Absoluto y sacar las consecuencias de la revelación del Dios trinitario. Pero el empeño de Hegel es radicalmente racionalista, porque se dirige a los filósofos para mostrarles que en esta empresa sólo puede triunfar el discurso lógico, sin creencias previas. Si se piensa a fondo el Absoluto, lo que resulta es una transcripción de la religión cristiana a un lenguaje religioso. Se trataría de una especie de "Lógica revelada" que abarcaría absolutamente toda la realidad, tanto profana como religiosa.
2. El autor es católico y manifiesta de diversos modos su propósito de mantenerse en el marco de la doctrina ortodoxa. No disimula lo que separa el intento hegeliano de la fe católica, para la cual ninguna explicación racional podría penetrar en el misterio de la vida divina, y advierte que el intento de Hegel es para el cristiano un delirio racionalista, porque el conocimiento natural del hombre no es en modo alguno idéntico al que Dios tiene de sí mismo, como pretende la Lógica hegeliana. Sin embargo, Bruaire mantiene que la construcción hegeliana puede suscitar una renovación de la teología especulativa. Aun reconociendo que el sistema hegeliano —como totalidad— es insostenible para un cristiano, el autor subraya la conveniencia de escuchar este lenguaje como una tentativa poderosa —aunque parcial— de comprender la religión cristiana, lo que permitirá nuevos desarrollos teológicos.
A.L.
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